( "Incomoda, que algo queda"... ) Carlos A. Torres Velasco: profesor interino, uno más entre miles en este bendito país: una sociedad incapaz, en apariencia, de afrontar con valentía y real determinación un fracaso descomunal; de consecuencias tan graves y prolongadas que aun apenas se vislumbran del todo... Me refiero a la EDUCACIÓN... ¡Y hablando de FRACASO!: más de diez años de profesión, más de diez años... Afortunado al principio (no lo pongo en duda), mas lastrado por debacles recurrentes (e inexplicables), tras siete oposiciones... Puede que sea el primer ciudadano que, en circunstancias semejantes, se atreve a exponer, pública y abiertamente, esta VERGÜENZA (¿mía?); este asunto sangrante, doloroso, devastador... absurdo y estéril.
Profesional, educador,
padre, ciudadano con un punto de vista "político" claro; persona, ante todo y en suma... Todo lo pongo en evidencia, aunque sin vocación de mártir: tan solo me niego a ocultarme, a cargar con toda la responsabilidad de lo que me pasa... ¡de lo que NOS pasa! Porque en esta sociedad tenemos más de un "armario" que airear. Un saludo a todo el que se atreva.
No quisiera terminar esta introducción y bienvenida sin mencionar que las fotos -la mayoría de ellas- y demás material gráfico que se ve en este blog es obra del que se dirige a Vds. Espero que les guste.

Hi! This is Carlos A. Torres Velasco. I am a Spaniard teacher of Art in a Secondary School of Santander (Cantabria... No, not a bank!), and so I have been since 2001. The problem about addressing Anglo-Saxon people (or rather: almost any other people from wherever in the whole world) is that... you won´t understand a single word of all this! And I am sure the point of such a case will be difficult for you all to grasp: something about striving for a decent and professional way of living; something that has to do with wasting almost your entire professional life in a sort of "limbo"; with dignity and apparently aimless purposes too...

I spent quite a long period in Northern Ireland, and that is why I know the sort of "logic" that pushes forward your societies and the individuals within. Where this sort of "logic" is concerned, Spanish society is a far removed (very "stiff") kind of structure. Actually, this could be said about any aspect you might single out: politics, economy, industry, universities, investigation, trade... And such a "huge mistake", as it were, pervades ALL in this country; obviously, education, as a whole, is affected too. Our personal lives as well: very deeply.

If you don´t have the "guts" to dive so profoundly, then just "enjoy" my few photographs here and there. I hope you will not be discouraged... Thanks a lot!

sábado, 7 de julio de 2012

Tercera carta abierta al Presidente del Gobierno, Don Mariano Rajoy

Excelentísimo Señor Presidente:

Mañana (de hecho, en apenas unos minutos; cuando redacto estas palabras, se entiende) se cumplen dos años del día exacto que, probablemente, marque el resto de mi vida. Mantengo la esperanza de que no sea así hasta el final (a pesar de todo, soy una persona esperanzada), pero, hasta el momento y a lo largo de estos más de setecientos días, ese día fatídico de jolgorio en Pamplona, terminaría por condicionar -gravemente- mi futuro, mi carrera, mis relaciones personales y profesionales, mi estado mental y espiritual -y quién sabe si también el físico, a la larga-, así como cualquier otro aspecto que defina y conforme a una persona y su vida en su conjunto.
    Lo que más detesto de esta situación crónica y desquiciada es la forma en que afecta, además, a todos los que me rodean. Es difícil explicar y detallar hasta qué punto tantos dependen de mí o se ven afectados, de un modo u otro, por lo que a mí me ha pasado y aun me pasa... Pero no me voy a centrar en esa "efeméride", Don Mariano: más bien, le quiero contar algo de lo que he estado haciendo últimamente, pues mi deseo es que usted se ponga en el lugar de los que estamos a años luz de La Moncloa o de La Moraleja.
    Creo que, en resumen, lo que he estado haciendo es CUMPLIR CON MI DEBER. En realidad, siempre lo he hecho, Señor Presidente. No quiero decir con ello que éste que se dirige a usted sea intachable, ¡nada más lejos!... Pero si el deber de un ciudadano es esforzarse (en el estudio o en el trabajo), ser honesto y leal a la sociedad y al Estado, pagar sus impuestos, respetar las leyes y las normas cívicas (¡y las de tráfico!: ya debo ser de los pocos que AUN usan los intermitentes), vivir y dejar vivir, mantener vivos la curiosidad y el espíritu crítico, discernir con criterio (por lo tanto), votar cuando se le requiera, etc., etc... Y si a eso se suma haber dado al mundo una hermosa, sensible, estudiosa y responsable hija, entonces este ciudadano ha cumplido más que dignamente. Lamentablemente... lo que se percibe en estos días (se lo digo con una absoluta convicción y muy preocupado) es que nada parece suficiente para los "voraces mercados" o para un Estado ABUSIVO E IMPLACABLE, que se ceba, precisamente, en los más leales, en los más decentes, que somos la mayoría: en los que MENOS se merecen tanta prepotencia, Don Mariano.
    Pero yo ya le he dicho antes cosas parecidas... Ahora le explico, sin tanto rodeo, lo que, de verdad, he estado haciendo en las últimas horas. ¿Le interesaría si le digo que he estado VIVIENDO?... No sin un cierto cargo de conciencia, eso sí; pero no por estar "abusando de mis posibilidades" (ya le pondré al tanto), sino porque no puedo apartar de mi cabeza a los "sacrificados" en toda esta masacre perpetrada por su muy benéfico, responsable y sensato Gobierno (a propósito: aun espero de alguno de los miembros de dicho Gobierno alguna explicación acerca del "premio" que les/nos espera a los "penitentes"; y para cuándo está previsto)... Creo que ya le he podido exponer que éste que se dirige a usted aun se mantiene erguido: ¡por poco lo estoy! En fin...
    Verá: hoy me he gastado 300€; lo que, imagino, no le puede impresionar (apenas supondrá el monto al que ascienden las dietas de un ministro en un día), pero es una cifra respetable, con la que (si le sirve para hacerse una idea) pueden comer tres personas en esta casa durante un mes, más o menos. Pero no es comida lo que he adquirido, sino parte del mobiliario con el que equipo una vivienda que, hace apenas unos meses compré, lo cual supuso para el Estado (y para alguno de sus contados colegas) unos cuantos miles de euros en impuestos y demás regalías. Le recuerdo que esta compra -u otras muchas- incluye un IVA del 18%, e implica, asimismo, que el autónomo que instaló los muebles paga otros nada desdeñables tributos (además del inevitable y consiguiente gasto en combustible, por lo que el Estado también se lleva un pico).
    Podría continuar con un repaso exhaustivo a los "eslabones" de esta cadena, pero a un Registrador como usted poco hay que explicarle, Don Mariano: ¡hasta yo lo entiendo, y sólo soy un pobre Lcdo. en Bellas Artes!, amén de un opositor "fracasado" (léase RECHAZADO)... El caso es que para mantener en marcha esta "máquina" (este proceso por el cual la gente genera "sinergias", actividad, DINERO) hace falta, como mínimo, tener un trabajo y hasta una ínfima esperanza de poder mantenerlo (el mismo u otro parecido: como cuando un ministro cesa y pasa a ser Consejero de un banco o de una compañía eléctrica; éste es un ejemplo que, sin duda, entenderá).
    ¿Entiende por qué le he estado diciendo que hoy "he cumplido con mi deber"?. Y hace unos días, otros 300€ (¡tirando la casa por la ventana, oiga!), que me he gastado en una bicicleta para mi hija, ¿qué le parece?: ¡¿UN DESPILFARRO?! ¿UNA LOCURA INSENSATA?... Eso será, en realidad, cuando ustedes nos quiten la "extra"; ¿y a los "apestados interinos" los meses del verano?... Lo cierto es que... ¡¡¿PARA QUÉ DIABLOS VAMOS A "PRIVARNOS", SI APENAS NOS SERVIRÍAN LOS AHORROS PARA IR TIRANDO UN PAR DE MESES MÁS?!!... ¿Y LUEGO, DON MARIANO?... ¿NOS VA A "RESCATAR" USTED?...  
    Con lo que se puede encontrar el país -en MUY poco tiempo- es con cientos de miles o con millones de INSOLVENTES y morosos, a los que les importe UN BLEDO lo que ustedes les puedan hacer, pues poco o nada tendrían que perder (suponiendo que ya hayan sido privados de sus trabajos, de sus viviendas, de sus pertenencias personales, de sus recuerdos familiares y, en definitiva, de su DIGNIDAD)... Y a propósito: ¿¡POR ENCIMA DE NUESTRAS POSIBILIDADES!?... ¿Usted se cree que esta locura de especulación y CODICIA, Señor Presidente, la hemos desencadenado los españoles más modestos; que los precios desorbitados y terriblemente INJUSTOS -¡de un bien básico, como es la vivienda!- los hemos decidido los ciudadanos, los muy ahogados y acosados compradores?... 
    Supongo que se hace cargo de la situación; y si no, pues yo se la explico: apenas necesitaría tres tardes... Y no creo que hagan falta ni tres meses para poner a MUUUUCHA gente al borde de un precipicio: puede que, antes de arrojarse al vacío, se den la vuelta y opten por enfrentarse a la fuerza que los empuja... ¿Han considerado usted y sus "estrategas" este escenario?... ¿Se lo han explicados ustedes a nuestros acreedores?... Claro que a ellos puede que les interese la posibilidad de arruinar -primero- a un país completo, para poder así -más tarde- sacar tajada en una eventual e inmensa reconstrucción, ¿no le parece?... Encima, encontrarían a su disposición (y a su merced) una masa ingente de "mano de obra" barata, sumisa y desesperada... Pero esto es sólo una "teoría". ¿O no?...
    Para terminar, le transcribo unas palabras que escribí hace unos días, Señor Presidente:
 
"Tal vez sea de los pocos que ahora tienen el derecho (y hasta el DEBER) de estar esperanzados. Pero eso no me puede hacer olvidar que la amenaza persiste; y, sobre todo, que hay miles que son o han sido mis compañeros, y ahora se ven en la cuneta: con "lo puesto", sin amparo, sin derechos (o con muy pocos: indecentemente mermados, a traición), sin esperanza... 
    Me estremezco ante la mera idea de mi pasividad ante este espanto: procuraré no consentírmelo nunca. Y espero no dejar de discernir con claridad quiénes son mis verdaderos enemigos, sea cual sea su naturaleza o procedencia: lamento, por cierto, contar ya con demasiados (y demasiado poderosos o arbitrarios)".
 

No hay comentarios: