NOTA: Se debe tener en cuenta que ésta es la última entrada. Por lo tanto, si se desea conocer la verdadera secuencia de este BLOG, habrá que acudir, primero, a las entradas más antiguas -la primera es del día 1 de septiembre de 2010.
Además, Ófisis, el único ser viviente aun en esta historia (Sísifo sólo convalece en un estado fantasmal), continúa su crónica concisa en http://torresmasaltas2.wordpress.com/
E-mail: balzuel@gmail.com
Se lo debo a Pepe Ramoneda y a los Looney Tunes, por captar para este blog una cantidad brutal de "lectores"... ¡Pero les prometo a ambos que no era mi intención usar a nadie como "cebo"!.
Aprovecho la entrada para felicitar a Josep Ramoneda por su artículo (claro que mi "link" ya supone un homenaje implícito al veterano periodista y pensador), al tiempo que me hago consciente del desaliento al que se condena a los que escribimos en vano (es decir, en España): a los ignorados, como yo, por descontado; pero también -me temo- a los que despiertan verdadero interés, como Ramoneda.
martes, 31 de julio de 2012
domingo, 29 de julio de 2012
TAKE SHELTER (Jeff Nichols, 2011)
NOTA: Se debe tener en cuenta que ésta es la última entrada. Por lo tanto, si se desea conocer la verdadera secuencia de este BLOG, habrá que acudir, primero, a las entradas más antiguas -la primera es del día 1 de septiembre de 2010.
Además, Ófisis, el único ser viviente aun en esta historia (Sísifo sólo convalece en un estado fantasmal), continúa su crónica concisa en http://torresmasaltas2.wordpress.com/
E-mail: balzuel@gmail.com
Crónica cinéfila de Ófisis en "Torres más altas / 2"...
http://torresmasaltas2.wordpress.com/2012/07/29/take-shelter-jeff-nichols-2011-53/
Además, Ófisis, el único ser viviente aun en esta historia (Sísifo sólo convalece en un estado fantasmal), continúa su crónica concisa en http://torresmasaltas2.wordpress.com/
E-mail: balzuel@gmail.com
Crónica cinéfila de Ófisis en "Torres más altas / 2"...
http://torresmasaltas2.wordpress.com/2012/07/29/take-shelter-jeff-nichols-2011-53/
viernes, 27 de julio de 2012
Descabalado y surrealista (la enésima a Don Mariano)
NOTA: Se debe tener en cuenta que ésta es la última entrada. Por lo tanto, si se desea conocer la verdadera secuencia de este BLOG, habrá que acudir, primero, a las entradas más antiguas -la primera es del día 1 de septiembre de 2010.
Además, Ófisis, el único ser viviente aun en esta historia (Sísifo sólo convalece en un estado fantasmal), continúa su crónica concisa en http://torresmasaltas2.wordpress.com/
E-mail: balzuel@gmail.com
No me está leyendo, lo sé... Ninguno de su aparato lo estará haciendo. No se crea que "me chupo el dedo", no señor... Y no lo digo porque -evidentemente- no me estén atendiendo a nada de lo que les comento o propongo; sino, más bien, porque me los imagino con cosas más importantes entre manos. Reconozco, además, que no se podrán permitir que "arengas" tan desmoralizantes como las mías les distraigan.
¿Saben?: cuentan con el chollo de un pueblo que les "entiende", que se pone en su lugar (además de haberles votado, previamente... ¡Ah, la grandeza de la democracia!). Y me siento aliviado, cada mañana, al despertar (si es que he conseguido dormir toda la noche, hasta la misma amanecida), cuando compruebo que no soy Don Mariano Rajoy, ¡para qué mentirle!...
Todo esto se lo digo en serio, y no se crea que no le respeto: no podría sentir más empatía que la que siento, se lo digo de corazón... El problema es que parece que la reciprocidad, en estas circunstancias, no parece darse en absoluto. ¡Pero qué esperar de los que hace años se alejaron del "pueblo llano"!... Es un hecho, Señor Presidente, no se ofenda: años luz nos separan, como ya le dije misivas atrás.
Estaba pensando, hace unas horas, en qué contarle a usted que ya no sepa; o en algo que le pueda importar lo más mínimo, además de no saber de ello... Estaba dándole vueltas a una especie de "fábula" semi-verídica, como la vida misma, acerca del pariente que se enriquece comprando a 5 y vendiendo a 15 y más tarde a 25 y luego a 40... La fábula sigue, más o menos, con ese pariente rico, quien contrata al pariente pobre, por cuatro perras; y se cuenta cómo, con el tiempo, el sueldo del modesto no se incrementa, aunque el rico decuplica y, más tarde, cuadruplica esos beneficios -ya previamente multiplicados por diez- y se compra tres casas, ocho coches y hasta un yate, pero el sueldo del pobre asalariado se estanca... Los coches son alemanes y japoneses, y el yate italiano o francés, no sé... La fábula indaga sobre la legitimidad de un pobre demasiado exigente, como encaramado a una cierta soberbia proletaria, que no parece entender la "ley de la oferta y de la demanda" (en este caso, la de la mano de obra, que, no nos engañemos, siempre sobró en este país), ni la ley sagrada del beneficio empresarial: sin más sentido éste que acumular para la legítima adquisición de casas, coches y yates, al parecer... Y de estas cosas iba la fábula semi-verídica que aun no le he escrito.
Le decía que hace unas horas me perdía en reflexiones en torno a las calles medio vacías de mi ciudad (en pleno verano) y la gran cantidad de genios, científicos, inventores y Premios Nobel que ha dado un pueblo más bien pequeño, como es el escocés: en qué tienen que ver cosas tan dispares como las que le refiero... Parece difícil encajarlas, pero, si se para un instante, se dará cuenta de que ciencia, codicia sin sentido, el bosón de Higgs (escocés de adopción, sí) y las calles tristes, saturadas con carteles de "SE VENDE" o "SE ALQUILA", guardan algún tipo de vinculación "poética", no sé si me explico...
La verdad es que estoy convencido de que hay algo más que "poesía" (descabalada o surrealista) en lo que nos rodea: como buen observador que me considero, creo que las bases del conocimiento, de la empresa HUMANISTA y AMBICIOSA (en un buen sentido del término), influyen en el aspecto de las calles, de las gentes, en su felicidad, en su futuro, en TODO... Lamentablemente, en este país ha habido demasiado aficionado a los "pelotazos", a la ostentación "exprés", al desprecio al que se esfuerza en algo que vaya más allá de unos pocos meses o años. Se ha "desincentivado" la modestia, la labor callada y pausada de los que conciben la vida en términos de lustros, décadas o, incluso, generaciones; la de ésos que se exigen a sí mismos algo más, siempre: algo sólido, algo ético, algo social, algo nuestro (de TODOS), algo creativo y competitivo... Nos hemos conformado, en el mejor de los casos, con montar una especie de "empresa multinacional de servicios", nutrida por herramienta, maquinaria, medios de transporte, software y hardware siempre o casi siempre importados...
Los alemanes deberían estar aliviados por no tener en nosotros un competidor serio, a estas alturas (me temo que nunca lo seremos, está claro); pero el caso es que quieren, al menos, que les devolvamos lo que nos prestaron, ¿verdad?... Y es evidente que ya no querrán dejar más dinero ni ceder inversiones a quien perdió su tiempo, su oportunidad, su ocasión histórica de salir de la mediocridad y de la indolencia endémicas... Ésa ha sido nuestra responsabilidad, nuestro error... ¡EL SUYO, señor Presidente!: el de su partido, el de la mayoría de nosotros...
Lo malo es que, con lo que están haciendo ustedes en estos días, lo están poniendo aun peor y aun más difícil (si cabe). Por este camino nos llevan al desastre; y ustedes lo saben, no me cabe la menor duda... La pregunta clave es: ¿POR QUÉ?... ¿Qué ganan ustedes?: ¿tiempo?... Tiempo, ¿para qué?...
Además, Ófisis, el único ser viviente aun en esta historia (Sísifo sólo convalece en un estado fantasmal), continúa su crónica concisa en http://torresmasaltas2.wordpress.com/
E-mail: balzuel@gmail.com
Excelentísimo:
No me está leyendo, lo sé... Ninguno de su aparato lo estará haciendo. No se crea que "me chupo el dedo", no señor... Y no lo digo porque -evidentemente- no me estén atendiendo a nada de lo que les comento o propongo; sino, más bien, porque me los imagino con cosas más importantes entre manos. Reconozco, además, que no se podrán permitir que "arengas" tan desmoralizantes como las mías les distraigan.
¿Saben?: cuentan con el chollo de un pueblo que les "entiende", que se pone en su lugar (además de haberles votado, previamente... ¡Ah, la grandeza de la democracia!). Y me siento aliviado, cada mañana, al despertar (si es que he conseguido dormir toda la noche, hasta la misma amanecida), cuando compruebo que no soy Don Mariano Rajoy, ¡para qué mentirle!...
Todo esto se lo digo en serio, y no se crea que no le respeto: no podría sentir más empatía que la que siento, se lo digo de corazón... El problema es que parece que la reciprocidad, en estas circunstancias, no parece darse en absoluto. ¡Pero qué esperar de los que hace años se alejaron del "pueblo llano"!... Es un hecho, Señor Presidente, no se ofenda: años luz nos separan, como ya le dije misivas atrás.
Estaba pensando, hace unas horas, en qué contarle a usted que ya no sepa; o en algo que le pueda importar lo más mínimo, además de no saber de ello... Estaba dándole vueltas a una especie de "fábula" semi-verídica, como la vida misma, acerca del pariente que se enriquece comprando a 5 y vendiendo a 15 y más tarde a 25 y luego a 40... La fábula sigue, más o menos, con ese pariente rico, quien contrata al pariente pobre, por cuatro perras; y se cuenta cómo, con el tiempo, el sueldo del modesto no se incrementa, aunque el rico decuplica y, más tarde, cuadruplica esos beneficios -ya previamente multiplicados por diez- y se compra tres casas, ocho coches y hasta un yate, pero el sueldo del pobre asalariado se estanca... Los coches son alemanes y japoneses, y el yate italiano o francés, no sé... La fábula indaga sobre la legitimidad de un pobre demasiado exigente, como encaramado a una cierta soberbia proletaria, que no parece entender la "ley de la oferta y de la demanda" (en este caso, la de la mano de obra, que, no nos engañemos, siempre sobró en este país), ni la ley sagrada del beneficio empresarial: sin más sentido éste que acumular para la legítima adquisición de casas, coches y yates, al parecer... Y de estas cosas iba la fábula semi-verídica que aun no le he escrito.
Le decía que hace unas horas me perdía en reflexiones en torno a las calles medio vacías de mi ciudad (en pleno verano) y la gran cantidad de genios, científicos, inventores y Premios Nobel que ha dado un pueblo más bien pequeño, como es el escocés: en qué tienen que ver cosas tan dispares como las que le refiero... Parece difícil encajarlas, pero, si se para un instante, se dará cuenta de que ciencia, codicia sin sentido, el bosón de Higgs (escocés de adopción, sí) y las calles tristes, saturadas con carteles de "SE VENDE" o "SE ALQUILA", guardan algún tipo de vinculación "poética", no sé si me explico...
La verdad es que estoy convencido de que hay algo más que "poesía" (descabalada o surrealista) en lo que nos rodea: como buen observador que me considero, creo que las bases del conocimiento, de la empresa HUMANISTA y AMBICIOSA (en un buen sentido del término), influyen en el aspecto de las calles, de las gentes, en su felicidad, en su futuro, en TODO... Lamentablemente, en este país ha habido demasiado aficionado a los "pelotazos", a la ostentación "exprés", al desprecio al que se esfuerza en algo que vaya más allá de unos pocos meses o años. Se ha "desincentivado" la modestia, la labor callada y pausada de los que conciben la vida en términos de lustros, décadas o, incluso, generaciones; la de ésos que se exigen a sí mismos algo más, siempre: algo sólido, algo ético, algo social, algo nuestro (de TODOS), algo creativo y competitivo... Nos hemos conformado, en el mejor de los casos, con montar una especie de "empresa multinacional de servicios", nutrida por herramienta, maquinaria, medios de transporte, software y hardware siempre o casi siempre importados...
Los alemanes deberían estar aliviados por no tener en nosotros un competidor serio, a estas alturas (me temo que nunca lo seremos, está claro); pero el caso es que quieren, al menos, que les devolvamos lo que nos prestaron, ¿verdad?... Y es evidente que ya no querrán dejar más dinero ni ceder inversiones a quien perdió su tiempo, su oportunidad, su ocasión histórica de salir de la mediocridad y de la indolencia endémicas... Ésa ha sido nuestra responsabilidad, nuestro error... ¡EL SUYO, señor Presidente!: el de su partido, el de la mayoría de nosotros...
Lo malo es que, con lo que están haciendo ustedes en estos días, lo están poniendo aun peor y aun más difícil (si cabe). Por este camino nos llevan al desastre; y ustedes lo saben, no me cabe la menor duda... La pregunta clave es: ¿POR QUÉ?... ¿Qué ganan ustedes?: ¿tiempo?... Tiempo, ¿para qué?...
¿Pasado?... ¿Presente?...
NOTA: Se debe tener en cuenta que ésta es la última entrada. Por lo tanto, si se desea conocer la verdadera secuencia de este BLOG, habrá que acudir, primero, a las entradas más antiguas -la primera es del día 1 de septiembre de 2010.
Además, Ófisis, el único ser viviente aun en esta historia (Sísifo sólo convalece en un estado fantasmal), continúa su crónica concisa en http://torresmasaltas2.wordpress.com/
E-mail: balzuel@gmail.com
Casi dos años ya... Me resulta estremecedor releer esto, seiscientos ochenta y cinco días después de aquello, y comprobar que casi nada ha cambiado; que, de hecho, esas palabras resuenan, en medio del eco de tantos días, con aun más vigencia y sentido que nunca... Da que pensar, ¿no?...
http://sisifoavejentado.blogspot.com.es/2010/10/visitas-y-gentil-condena.html
Además, Ófisis, el único ser viviente aun en esta historia (Sísifo sólo convalece en un estado fantasmal), continúa su crónica concisa en http://torresmasaltas2.wordpress.com/
E-mail: balzuel@gmail.com
Casi dos años ya... Me resulta estremecedor releer esto, seiscientos ochenta y cinco días después de aquello, y comprobar que casi nada ha cambiado; que, de hecho, esas palabras resuenan, en medio del eco de tantos días, con aun más vigencia y sentido que nunca... Da que pensar, ¿no?...
http://sisifoavejentado.blogspot.com.es/2010/10/visitas-y-gentil-condena.html
miércoles, 18 de julio de 2012
Hoy más pertinente que nunca (otro recordatorio)
http://sisifoavejentado.blogspot.com.es/2012/03/en-la-llaga.html
http://sisifoavejentado.blogspot.com.es/2012/02/melodramas-si-yo-fuera-funcionario.html
Saludos desde la cuerda floja, con el abismo a los pies.
http://sisifoavejentado.blogspot.com.es/2012/02/melodramas-si-yo-fuera-funcionario.html
Saludos desde la cuerda floja, con el abismo a los pies.
Restas y divisiones (a Don Mariano Rajoy)
Muy Señor mío:
¿Recuerda la "Internacional del Buen Rollo Universal"?... Parece que fue hace una eternidad, ¿a que sí?... España, Potencia Galáctica sin par, se empeñaba en la transformación del mundo mundial, repartiendo a diestro y siniestro pazzzz y solidaridazzzz... El resultado, previsible (al menos, para mí siempre lo fue), ha sido que aquí nos hemos quedado sin paz y sin solidaridad: me refiero a ese lujo insostenible del "Estado del bienestar". ¡Atroz!, ¿no es cierto?: ¡pretender que todo quisqui (el "soe" estaba empeñado en que REALMENTE fuera toquisqui, sin importar cuántos ni de dónde procedieran) disfrutase de un trabajo digno, bien pagado y de duración indefinida; de una vivienda decente (pero, eso sí: a precios de los Emiratos Árabes), atención médica garantizada, educación obligatoria y post-obligatoria gratuitas, serenidad y pensiones para la senectud, excelentes redes de comunicación! (bueno, eso depende de dónde viva uno)... además de unos cuantos "privilegios", ganados a pulso... A eso se sumaban los "imponderables" -tan sutiles, pero necesarios- de la felicidad y la esperanza.
Le decía que siempre he estado convencido de que, de tanto repartir lo que nunca nos sobró (y que, además, comprábamos con dinero prestado), terminaríamos quedándonos sin nada: para nosotros y para nuestros propios hijos. NO ME EQUIVOCABA.
Ustedes tienen la "coartada" perfecta en todo este desbarajuste: la herencia. Pero se suelen olvidar de un "pequeño detalle": que ustedes son tan responsables del desastre como cualquiera. Sin tanto idealismo de pacotilla, buenista e ingenuo; sin tanta arrogancia progre (la suya es de otro tipo: más "tradicional", más de "familia bien", con más "clase"); sin el lastre social y las lacras que asoman detrás de todo "neo-riquismo" radical; con alguna baza a su favor, incluso, como son las que le proporciona a uno ser técnico del "Icai", o Doctorado por Deusto, o haber hecho algún máster que otro en Harvard, Cambridge o Chicago... Supongo que esas cosas no "molestan" (una digresión, si me lo permite: demoledora la elocuencia de esa lista de universidades, por desgracia).
¡No importa, da lo mismo!: parecemos víctimas de alguna tara genética, maldición mora (o "romaní"), carencia endémica, fatalismo meridional o contubernio judeo-masónico... Se diría que no tenemos remedio, pero mi diagnóstico es menos supersticioso, pues es claro que cada cosa que nos ocurre nos la buscamos nosotros, casi adrede, en esfuerzo titánico y a pulso. Permítame la ya previsible arrogancia de no aplicarme el cuento reflexivamente (o el diagnóstico), ya que, a estas alturas de las hipótesis y de mi vida, estoy CONVENCIDO de ser, precisamente, víctima de esta lacra hispana: la derrota, la chapuza, la ostentación vana y la ruina; todas ellas, morales, "técnicas" y económicas.
¿Se resumiría todo ello en una evidente falta de "proyecto común"? (ustedes, TODOS, lo hacen imposible, al estar VENDIDOS a "fuerzas fácticas" desleales; el resultado es de cajón, pues cuanto peor para España, mejor para ellos... o eso se creen ellos); ¿en una carencia de perseverancia histórica?; ¿de confianza en las posibilidades de este pueblo, siempre subestimado y desaprovechado?...
Por principio, desconfío de las metáforas fáciles; aunque hay una idea -simple, pero de una nitidez y perfección preclara- que sintetiza lo que nos pasa y lo que USTEDES NOS ESTÁN HACIENDO. Expresa, además, la dimensión histórica del fracaso al que nos están abocando HOY: LOS PUEBLOS VERDADERAMENTE GRANDES SE DEDICAN A SUMAR Y A MULTIPLICAR; LOS MINÚSCULOS, A RESTAR Y A DIVIDIR... Ése es su actual empeño: restar y dividir... ¡Aunque puede que algunas cuentas corrientes se multipliquen y que a ellas se sumen las de nuevos "afines" o "afectos"!...
Piense en ello, su Excelencia. Y vea qué o quiénes merecen ser sumados a esto; y hasta qué punto -atroz e irreversible- está consiguiendo, tan solo, dividirnos... Atentamente,
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino Emérito)
P.D.: Un día éste MUY adecuado para mencionar ciertas cosas, ¡sí señor!...
¿Recuerda la "Internacional del Buen Rollo Universal"?... Parece que fue hace una eternidad, ¿a que sí?... España, Potencia Galáctica sin par, se empeñaba en la transformación del mundo mundial, repartiendo a diestro y siniestro pazzzz y solidaridazzzz... El resultado, previsible (al menos, para mí siempre lo fue), ha sido que aquí nos hemos quedado sin paz y sin solidaridad: me refiero a ese lujo insostenible del "Estado del bienestar". ¡Atroz!, ¿no es cierto?: ¡pretender que todo quisqui (el "soe" estaba empeñado en que REALMENTE fuera toquisqui, sin importar cuántos ni de dónde procedieran) disfrutase de un trabajo digno, bien pagado y de duración indefinida; de una vivienda decente (pero, eso sí: a precios de los Emiratos Árabes), atención médica garantizada, educación obligatoria y post-obligatoria gratuitas, serenidad y pensiones para la senectud, excelentes redes de comunicación! (bueno, eso depende de dónde viva uno)... además de unos cuantos "privilegios", ganados a pulso... A eso se sumaban los "imponderables" -tan sutiles, pero necesarios- de la felicidad y la esperanza.
Le decía que siempre he estado convencido de que, de tanto repartir lo que nunca nos sobró (y que, además, comprábamos con dinero prestado), terminaríamos quedándonos sin nada: para nosotros y para nuestros propios hijos. NO ME EQUIVOCABA.
Ustedes tienen la "coartada" perfecta en todo este desbarajuste: la herencia. Pero se suelen olvidar de un "pequeño detalle": que ustedes son tan responsables del desastre como cualquiera. Sin tanto idealismo de pacotilla, buenista e ingenuo; sin tanta arrogancia progre (la suya es de otro tipo: más "tradicional", más de "familia bien", con más "clase"); sin el lastre social y las lacras que asoman detrás de todo "neo-riquismo" radical; con alguna baza a su favor, incluso, como son las que le proporciona a uno ser técnico del "Icai", o Doctorado por Deusto, o haber hecho algún máster que otro en Harvard, Cambridge o Chicago... Supongo que esas cosas no "molestan" (una digresión, si me lo permite: demoledora la elocuencia de esa lista de universidades, por desgracia).
¡No importa, da lo mismo!: parecemos víctimas de alguna tara genética, maldición mora (o "romaní"), carencia endémica, fatalismo meridional o contubernio judeo-masónico... Se diría que no tenemos remedio, pero mi diagnóstico es menos supersticioso, pues es claro que cada cosa que nos ocurre nos la buscamos nosotros, casi adrede, en esfuerzo titánico y a pulso. Permítame la ya previsible arrogancia de no aplicarme el cuento reflexivamente (o el diagnóstico), ya que, a estas alturas de las hipótesis y de mi vida, estoy CONVENCIDO de ser, precisamente, víctima de esta lacra hispana: la derrota, la chapuza, la ostentación vana y la ruina; todas ellas, morales, "técnicas" y económicas.
¿Se resumiría todo ello en una evidente falta de "proyecto común"? (ustedes, TODOS, lo hacen imposible, al estar VENDIDOS a "fuerzas fácticas" desleales; el resultado es de cajón, pues cuanto peor para España, mejor para ellos... o eso se creen ellos); ¿en una carencia de perseverancia histórica?; ¿de confianza en las posibilidades de este pueblo, siempre subestimado y desaprovechado?...
Por principio, desconfío de las metáforas fáciles; aunque hay una idea -simple, pero de una nitidez y perfección preclara- que sintetiza lo que nos pasa y lo que USTEDES NOS ESTÁN HACIENDO. Expresa, además, la dimensión histórica del fracaso al que nos están abocando HOY: LOS PUEBLOS VERDADERAMENTE GRANDES SE DEDICAN A SUMAR Y A MULTIPLICAR; LOS MINÚSCULOS, A RESTAR Y A DIVIDIR... Ése es su actual empeño: restar y dividir... ¡Aunque puede que algunas cuentas corrientes se multipliquen y que a ellas se sumen las de nuevos "afines" o "afectos"!...
Piense en ello, su Excelencia. Y vea qué o quiénes merecen ser sumados a esto; y hasta qué punto -atroz e irreversible- está consiguiendo, tan solo, dividirnos... Atentamente,
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino Emérito)
P.D.: Un día éste MUY adecuado para mencionar ciertas cosas, ¡sí señor!...
lunes, 16 de julio de 2012
Sexta misiva al Señor Presidente: SOCIOLOGÍA
Excelentísimo:
Últimamente no me siento muy inspirado. Con todo, debo escribirle a usted, pues es un deber -que me he encomendado- tenerle al tanto de la VIDA REAL; así, con mayúscula... Procuro, estos días, centrarme en los trabajos y tareas que ha acarreado mi nuevo piso: bricolaje, muebles, detalles mil... Lo estoy haciendo a lo barato (¡qué remedio!: yo no soy registrador, se hará cargo), pero estoy logrando grandes cosas, de las que me siento muy orgulloso: con no demasiado dinero, pero con mucho esfuerzo, herramientas e ingenio.
Y, a propósito, le seré franco: este país necesitaría a MUCHA gente como yo... ¡Se lo digo sin arrogancia!; pero sin falsa modestia tampoco, es evidente... Procuraré explicarle (y, si es posible, demostrarle) por qué lo considero así. Y dado que usted estará muy ocupado con su "cutter" y con sus negociaciones con el FMI y con el European Central Bank (¿o se escribe en alemán?), no creo que pueda leerme con el detenimiento que mis reflexiones exigen y -también lo creo- se merecen. Por lo tanto, haré un compendio de lo esencial para usted.
Le adelanto que una de las tesis esenciales -en estos dos largos años de escritos y reivindicaciones- se basa, precisamente, en eso que le decía unas líneas más arriba: que este país, entrañable pero (en demasiados aspectos) lamentable y mezquino, ha desperdiciado, ninguneado, despreciado, apartado, degradado, decepcionado y masacrado -incluso- a decenas de miles o a centenares de miles de personas trabajadoras, decentes, auto-exigentes, con un acentuado espíritu cívico Y CRÍTICO (a ambos los considero "siameses", como quien dice: piense en ello), ilusionadas y sobradamente preparadas. Su enorme potencial ha sido, por lo general, vertido en un retrete, mientras unos y otros (ponga aquí casi todas las siglas, estamentos, empresas e instituciones que se le ocurran: su partido incluido) tiraban de la cadena. Por lo general, lo han hecho sin despeinarse y sin el más mínimo cargo de conciencia... En el mejor de los casos, puede que lo hicieran, al menos, convencidos de estar obrando "correctamente"... ¡PERO NO PODRÍAN HABER ESTADO MÁS EQUIVOCADOS!: se han cargado ustedes, como mínimo, un par de generaciones. ¿Nos vamos "situando"?...
Se creerán que ha merecido la pena, pero una de esas dos grandes sacrificadas es la que debería haber logrado ya para España, a estas alturas, al menos un par de Premios Nobel; de medicina o de física. ¿Sabe a qué me refiero?: a los "intangibles", a los valores añadidos, a lo más sólido, duradero y "sagrado"; a la Ciencia, el Arte, el Pensamiento, la tecnología, las grandes universidades...
Yo, en comparación, soy más bien poca cosa, pero hubiese formado parte de esa porción de la ciudadanía más leal, más decente y más digna... ¡si se me hubiese permitido!... ¡De acuerdo, Señor Presidente!: le concedo que a mí se me ha dado, al menos, una "oportunidad". Pero me temo que se me podría retirar -muy pronto y del todo- la "confianza"; pues acaso ya se me considere, a corto o medio plazo, "sacrificable", "sobrante", "despreciable", "innecesario"... Le repito: lo que parecería, tan solo, un drama personal y familiar demoledor, aterrador (¡uno más!), significaría, en realidad, la señal de claudicación DEFINITIVA de esta sociedad, inexorablemente hundida y fracasada... ¿Le parece que exagero?... ¡Ni lo más mínimo!
Ustedes creen (siempre lo han hecho, en realidad) que no nos necesitan; pero debo no sólo recordarle que, sin nosotros, ustedes no son nada, sino también que, si nosotros somos obligados a naufragar, entonces ustedes nos acompañarán, más tarde o más temprano, al fondo más tenebroso. ¿Se hacen una idea?.
Le decía que yo, llegado a estas coyunturas, me considero un "lujo" que esta sociedad no se merece (ya le daré más detalles, permanezca atento). Le pareceré presuntuoso, pero cada día estoy más convencido de ello: tras lustros o, incluso, décadas de inseguridad; de un tácito desprecio auto-infligido; de miedo y angustia; de pedir perdón y dar las gracias por todo; a estas alturas de la vida, cargado de ofensas, de agravios (comparativos y de todo tipo), de desprecios y de incomprensión, es el día en que me incorporo, con orgullo, y clamo y reclamo:
No se crean mejores que yo, no se escuden en su muy altiva condescendencia: no me ignoren ni crean que sin mí van a estar mejor... ¡No simplifiquen tanto las cosas, señores políticos, catedráticos, financieros, jueces, funcionarios de carrera, ilustres todos!...
Somos miles o millones: si no cuentan con nosotros, nos tendrán enfrente. ¿Creen, de veras, que se lo van a poder permitir?; ¿que es lo que este país se merece y necesita?... ¿A QUIÉNES ha necesitado y necesita, REALMENTE, España?... Desde luego, los ideólogos y sociólogos de este país, tan EQUIVOCADO, han errado demasiado sobre en qué y en quiénes debían recaer las ABSOLUTAS PRIORIDADES... ¿¡Que los inmigrantes nos van a pagar las pensiones, nos han repetido hasta la saciedad!?... En mi caso, con poco éxito: yo ya doy POR HECHO que pasaré una ancianidad (si es que llego) terrible y miserable; que mis cotizaciones las estoy tirando, de hecho, a un saco sin fondo; que sólo están sirviendo para pagar las prestaciones o dádivas actuales (entre ellas, son demasiadas las dedicadas a algunos que no se las han ganado; o apenas); o para liquidar intereses; o -lo que es peor y más irritante- para mantener en pie, a toda costa, a entidades financieras y los privilegios de algunas "castas"... ¿Qué le parece eso? ¿Demasiado "derrotista"?...
Cambien de rumbo. ¡Ése sí que sería un CAMBIO HISTÓRICO!: el inicio de una nueva ruta que merecería, verdaderamente, la pena transitar... Y sepan prescindir de los VERDADEROS ENEMIGOS DE ESTE PROYECTO LLAMADO ESPAÑA (pese a quien pese): no la paguen con los más leales, con los mejores y más pacíficos... no con la gente que es como yo... ¿Se merecen ustedes a gente así?... Aun no: vayan pensando cómo ganársela, en lugar de cavar para ellos una enorme fosa común.
Además, esa gente podría, de repente, dejar a un lado su docilidad y su faceta más "amable". Y si eso ocurre algún día, a mí no me gustaría ponerme en su camino: ya sabe cómo nos las gastamos en España, cuando nos ponemos...
A su leal servicio (si me dejan),
Carlos Torres Velasco (Profesor Interino Emérito)
Últimamente no me siento muy inspirado. Con todo, debo escribirle a usted, pues es un deber -que me he encomendado- tenerle al tanto de la VIDA REAL; así, con mayúscula... Procuro, estos días, centrarme en los trabajos y tareas que ha acarreado mi nuevo piso: bricolaje, muebles, detalles mil... Lo estoy haciendo a lo barato (¡qué remedio!: yo no soy registrador, se hará cargo), pero estoy logrando grandes cosas, de las que me siento muy orgulloso: con no demasiado dinero, pero con mucho esfuerzo, herramientas e ingenio.
Y, a propósito, le seré franco: este país necesitaría a MUCHA gente como yo... ¡Se lo digo sin arrogancia!; pero sin falsa modestia tampoco, es evidente... Procuraré explicarle (y, si es posible, demostrarle) por qué lo considero así. Y dado que usted estará muy ocupado con su "cutter" y con sus negociaciones con el FMI y con el European Central Bank (¿o se escribe en alemán?), no creo que pueda leerme con el detenimiento que mis reflexiones exigen y -también lo creo- se merecen. Por lo tanto, haré un compendio de lo esencial para usted.
Le adelanto que una de las tesis esenciales -en estos dos largos años de escritos y reivindicaciones- se basa, precisamente, en eso que le decía unas líneas más arriba: que este país, entrañable pero (en demasiados aspectos) lamentable y mezquino, ha desperdiciado, ninguneado, despreciado, apartado, degradado, decepcionado y masacrado -incluso- a decenas de miles o a centenares de miles de personas trabajadoras, decentes, auto-exigentes, con un acentuado espíritu cívico Y CRÍTICO (a ambos los considero "siameses", como quien dice: piense en ello), ilusionadas y sobradamente preparadas. Su enorme potencial ha sido, por lo general, vertido en un retrete, mientras unos y otros (ponga aquí casi todas las siglas, estamentos, empresas e instituciones que se le ocurran: su partido incluido) tiraban de la cadena. Por lo general, lo han hecho sin despeinarse y sin el más mínimo cargo de conciencia... En el mejor de los casos, puede que lo hicieran, al menos, convencidos de estar obrando "correctamente"... ¡PERO NO PODRÍAN HABER ESTADO MÁS EQUIVOCADOS!: se han cargado ustedes, como mínimo, un par de generaciones. ¿Nos vamos "situando"?...
Se creerán que ha merecido la pena, pero una de esas dos grandes sacrificadas es la que debería haber logrado ya para España, a estas alturas, al menos un par de Premios Nobel; de medicina o de física. ¿Sabe a qué me refiero?: a los "intangibles", a los valores añadidos, a lo más sólido, duradero y "sagrado"; a la Ciencia, el Arte, el Pensamiento, la tecnología, las grandes universidades...
Yo, en comparación, soy más bien poca cosa, pero hubiese formado parte de esa porción de la ciudadanía más leal, más decente y más digna... ¡si se me hubiese permitido!... ¡De acuerdo, Señor Presidente!: le concedo que a mí se me ha dado, al menos, una "oportunidad". Pero me temo que se me podría retirar -muy pronto y del todo- la "confianza"; pues acaso ya se me considere, a corto o medio plazo, "sacrificable", "sobrante", "despreciable", "innecesario"... Le repito: lo que parecería, tan solo, un drama personal y familiar demoledor, aterrador (¡uno más!), significaría, en realidad, la señal de claudicación DEFINITIVA de esta sociedad, inexorablemente hundida y fracasada... ¿Le parece que exagero?... ¡Ni lo más mínimo!
Ustedes creen (siempre lo han hecho, en realidad) que no nos necesitan; pero debo no sólo recordarle que, sin nosotros, ustedes no son nada, sino también que, si nosotros somos obligados a naufragar, entonces ustedes nos acompañarán, más tarde o más temprano, al fondo más tenebroso. ¿Se hacen una idea?.
Le decía que yo, llegado a estas coyunturas, me considero un "lujo" que esta sociedad no se merece (ya le daré más detalles, permanezca atento). Le pareceré presuntuoso, pero cada día estoy más convencido de ello: tras lustros o, incluso, décadas de inseguridad; de un tácito desprecio auto-infligido; de miedo y angustia; de pedir perdón y dar las gracias por todo; a estas alturas de la vida, cargado de ofensas, de agravios (comparativos y de todo tipo), de desprecios y de incomprensión, es el día en que me incorporo, con orgullo, y clamo y reclamo:
¡¡MI FRACASO ES EL SUYO, ES EL DE TODOS!!...
Somos miles o millones: si no cuentan con nosotros, nos tendrán enfrente. ¿Creen, de veras, que se lo van a poder permitir?; ¿que es lo que este país se merece y necesita?... ¿A QUIÉNES ha necesitado y necesita, REALMENTE, España?... Desde luego, los ideólogos y sociólogos de este país, tan EQUIVOCADO, han errado demasiado sobre en qué y en quiénes debían recaer las ABSOLUTAS PRIORIDADES... ¿¡Que los inmigrantes nos van a pagar las pensiones, nos han repetido hasta la saciedad!?... En mi caso, con poco éxito: yo ya doy POR HECHO que pasaré una ancianidad (si es que llego) terrible y miserable; que mis cotizaciones las estoy tirando, de hecho, a un saco sin fondo; que sólo están sirviendo para pagar las prestaciones o dádivas actuales (entre ellas, son demasiadas las dedicadas a algunos que no se las han ganado; o apenas); o para liquidar intereses; o -lo que es peor y más irritante- para mantener en pie, a toda costa, a entidades financieras y los privilegios de algunas "castas"... ¿Qué le parece eso? ¿Demasiado "derrotista"?...
Cambien de rumbo. ¡Ése sí que sería un CAMBIO HISTÓRICO!: el inicio de una nueva ruta que merecería, verdaderamente, la pena transitar... Y sepan prescindir de los VERDADEROS ENEMIGOS DE ESTE PROYECTO LLAMADO ESPAÑA (pese a quien pese): no la paguen con los más leales, con los mejores y más pacíficos... no con la gente que es como yo... ¿Se merecen ustedes a gente así?... Aun no: vayan pensando cómo ganársela, en lugar de cavar para ellos una enorme fosa común.
Además, esa gente podría, de repente, dejar a un lado su docilidad y su faceta más "amable". Y si eso ocurre algún día, a mí no me gustaría ponerme en su camino: ya sabe cómo nos las gastamos en España, cuando nos ponemos...
A su leal servicio (si me dejan),
Carlos Torres Velasco (Profesor Interino Emérito)
sábado, 14 de julio de 2012
LARGA PUNTILLA (o remate de la 5ª misiva a Don Mariano)
Su Ilustrísima:
Estoy cansado; y no sé si me siento muy inspirado, a estas horas de la madrugada... Mes de julio, pero no lo parece: no hay alegría en la calle, la temperatura es de otoño... En la televisión y en la prensa prefiero no verlos a ustedes: acentúan esa sensación gélida, gris, desabrida... Y en "La 2" (aun de TVE), que es de los pocos canales de T.V. a los que aun me asomo, de vez en cuando, repiten, una y otra vez, los mismos interesantísimos documentales... Pocos son españoles: ¡significativo!... Y lo es aun más que uno de esos escasos ejemplos de producción propia sea la serie "El hombre y la tierra", ya de antes de la "Gloriosa" del 78, ¡qué tiempos! (que, por cierto, ustedes estarán haciendo añorar a no pocos en estos días... ¡Incluso a gente de izquierdas, que ya es nostalgia!).
Le decía que estaba cansado: es lo que tiene ser un "manitas" y ser el feliz propietario de un modesto piso recién comprado... ¿Le expliqué ya que aun me quedan veinticuatro años para terminar de pagarlo?... Le agradecería, por cierto, que alguno de sus asesores -tan listos ellos- me recomienden qué hacer: si aguantar o malvenderlo (en estos tiempos, ¡qué remedio!). Había pensado en llegar, con alguna solvencia, a los setenta y uno, pero ya ve usted lo difícil que nos lo están poniendo (ellos y ustedes).
Por cierto: aun espero un gesto suyo acerca de eso que le comenté un día... ¡Si, hombre!: eso de decretar, un viernes de estos, que los bancos nos descuenten a todos -de las hipotecas y de sus comisiones- un porcentaje equivalente a nuestra enorme pérdida de poder adquisitivo (si es que aun nos queda algo de ese "poder"). Entienda que sería de justicia, ¿no cree?... ¡Ah, que ve problemas en su puesta en práctica, ciertos detalles "técnicos"!... ¡Claro, ya me parecía a mí!; porque con lo "populares", justos y ecuánimes que son ustedes, y con lo mucho que les preocupan España y los españoles, tiene que haber algo MUY gordo para que no se pongan ya con ello... ¡ÉSA SÍ QUE SERÍA UNA "REFORMA", OIGA!.
Un poco más en serio, le diré que se equivocan de medio a medio... Y si los anteriores Gobiernos se han equivocado -con torpeza y hasta con premeditación y alevosía-, no veo en su "coartada" sustento suficiente. Verá: parten ustedes de la tesis de que la "piedra angular" de este país es la Banca; ¡y se equivocan, insisto, pues esa piedra maestra es LA GENTE, coño!... Disculpe por la interjección, pero es que no sé si usted ve algo tan sencillo, cuando yo lo atisbo con una nitidez cegadora. ¡La mayoría lo hace, de hecho!... ¡Pregunte usted por ahí!...
Lo cierto es que de un país como éste (en el que se han llegado a sentir "relativamente" más cómodos, más APOYADOS y más ASISTIDOS los delincuentes inmigrantes indocumentados que los propios ciudadanos "españoles antiguos", bien arraigados y desgraciados herederos de generaciones de tantos sufridos compatriotas), ya poco me extraña o sorprende. Ni siquiera, que todo el Sistema se esté preparando para el más gigantesco suicidio colectivo jamás concebido en Europa (al margen, claro, de las dos Guerras Mundiales; aunque... ¡todo se puede llegar a andar, Don Mariano!). ¡Pero que lo hagan ustedes, adalides de todas las esencias hispanas!... Decepcionante es poco, oiga...
Quisiera terminar, pues -como ya le he dicho- estoy cansado, es tarde y ustedes me están quitando el sueño así como no poco de mi salud y de mi futuro. Lo haré enumerando lo que en esta casa se paga con una "extraordinaria" de Navidad: aparte de las cuatro cosas que nos regalamos, de un par de cenas y, acaso, alguna escapada de fin de semana a Madrid, por ejemplo... Aparte de eso (en esta casa la Lotería está proscrita), pues se pagan un par o tres de seguros, tan baratos, asequibles y "opcionales", oiga, últimamente; aprovechamos para recuperarnos de deudas que se han ido arrastrando desde septiembre, tras pagar libros de la E.S.O. (¡pronto vendrán cosas más gordas!), ropa (tal vez), una Matrícula de Conservatorio (estudios, los musicales, YA SÓLO al alcance de MUY POCOS) y toda una larga serie interminable de MIERDA -la cual procuro borrar de mi mente el resto del año- con la que se nos ha ido cargando a las familias, sin piedad, sin medida... Por lo general, en invierno la facturas del gas y de la luz se "animan", así que ése es otro pico... ¡Y que no se me olvide la última cuota del IBI y del Impuesto de Circulación, que el Excmo. Ayto., siempre tan atento, ha tenido a bien aplazarme en tres cómodas "entregas"!...
¿Qué le parece?: en efecto, ya ve que me voy a quedar sin el abrigo de alpaca, sin los perfumes italianos o franceses, sin mis "juergas" navideñas, sin kilos y kilos de angulas o cigalas; voy a verme obligado a prescindir de esas botellas de "Vega Sicilia" que me metía, entre pecho y espalda, cada 31 de diciembre, ¡Dios mío!... ¡A este paso tendré que vender o el "Lexus" o el "Cayenne" o el "Maserati", dese cuenta de lo que me está haciendo su política de austeridad, Señor Rajoy!... ¡Y eso que yo no soy de los que le da a otro tipo de vicios, más caros y de dudosa legalidad, usted ya me entiende!...
Esto es lo que nos ha traído vivir tan "por encima de nuestras posibilidades", ¡sí señor!...
En compendio: ENHORABUENA Y GRACIAS.
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito", todavía)
Santander, 14 de julio de 2012
P.D.: En la próxima entrega le voy a dar un par de ideas (gratis) acerca de qué se puede hacer con parte del Patrimonio Español para sacarle algún partido, que nunca estará de más. Sobre todo habida cuenta de que, dentro de poco, vendidos el oro, los aeropuertos, los puertos, las carreteras, los ferrocarriles, los hospitales, las escuelas e institutos, Correos, TVE y Retevisión, los astilleros y resto de fábricas de mayor valor estratégico, la minería, la siderurgia, los satélites, el "Príncipe de Asturias" (el porta-aeronaves, se entiende), los Paradores Nacionales... entonces creo que ya sólo nos quedarán el Museo del Prado, El "Guernica", El Escorial, la Alhambra, El Palacio Real y los "Stradivarius". ¡Suerte con las "liquidaciones" y ánimo!.
Estoy cansado; y no sé si me siento muy inspirado, a estas horas de la madrugada... Mes de julio, pero no lo parece: no hay alegría en la calle, la temperatura es de otoño... En la televisión y en la prensa prefiero no verlos a ustedes: acentúan esa sensación gélida, gris, desabrida... Y en "La 2" (aun de TVE), que es de los pocos canales de T.V. a los que aun me asomo, de vez en cuando, repiten, una y otra vez, los mismos interesantísimos documentales... Pocos son españoles: ¡significativo!... Y lo es aun más que uno de esos escasos ejemplos de producción propia sea la serie "El hombre y la tierra", ya de antes de la "Gloriosa" del 78, ¡qué tiempos! (que, por cierto, ustedes estarán haciendo añorar a no pocos en estos días... ¡Incluso a gente de izquierdas, que ya es nostalgia!).
Le decía que estaba cansado: es lo que tiene ser un "manitas" y ser el feliz propietario de un modesto piso recién comprado... ¿Le expliqué ya que aun me quedan veinticuatro años para terminar de pagarlo?... Le agradecería, por cierto, que alguno de sus asesores -tan listos ellos- me recomienden qué hacer: si aguantar o malvenderlo (en estos tiempos, ¡qué remedio!). Había pensado en llegar, con alguna solvencia, a los setenta y uno, pero ya ve usted lo difícil que nos lo están poniendo (ellos y ustedes).
Por cierto: aun espero un gesto suyo acerca de eso que le comenté un día... ¡Si, hombre!: eso de decretar, un viernes de estos, que los bancos nos descuenten a todos -de las hipotecas y de sus comisiones- un porcentaje equivalente a nuestra enorme pérdida de poder adquisitivo (si es que aun nos queda algo de ese "poder"). Entienda que sería de justicia, ¿no cree?... ¡Ah, que ve problemas en su puesta en práctica, ciertos detalles "técnicos"!... ¡Claro, ya me parecía a mí!; porque con lo "populares", justos y ecuánimes que son ustedes, y con lo mucho que les preocupan España y los españoles, tiene que haber algo MUY gordo para que no se pongan ya con ello... ¡ÉSA SÍ QUE SERÍA UNA "REFORMA", OIGA!.
Un poco más en serio, le diré que se equivocan de medio a medio... Y si los anteriores Gobiernos se han equivocado -con torpeza y hasta con premeditación y alevosía-, no veo en su "coartada" sustento suficiente. Verá: parten ustedes de la tesis de que la "piedra angular" de este país es la Banca; ¡y se equivocan, insisto, pues esa piedra maestra es LA GENTE, coño!... Disculpe por la interjección, pero es que no sé si usted ve algo tan sencillo, cuando yo lo atisbo con una nitidez cegadora. ¡La mayoría lo hace, de hecho!... ¡Pregunte usted por ahí!...
Lo cierto es que de un país como éste (en el que se han llegado a sentir "relativamente" más cómodos, más APOYADOS y más ASISTIDOS los delincuentes inmigrantes indocumentados que los propios ciudadanos "españoles antiguos", bien arraigados y desgraciados herederos de generaciones de tantos sufridos compatriotas), ya poco me extraña o sorprende. Ni siquiera, que todo el Sistema se esté preparando para el más gigantesco suicidio colectivo jamás concebido en Europa (al margen, claro, de las dos Guerras Mundiales; aunque... ¡todo se puede llegar a andar, Don Mariano!). ¡Pero que lo hagan ustedes, adalides de todas las esencias hispanas!... Decepcionante es poco, oiga...
Quisiera terminar, pues -como ya le he dicho- estoy cansado, es tarde y ustedes me están quitando el sueño así como no poco de mi salud y de mi futuro. Lo haré enumerando lo que en esta casa se paga con una "extraordinaria" de Navidad: aparte de las cuatro cosas que nos regalamos, de un par de cenas y, acaso, alguna escapada de fin de semana a Madrid, por ejemplo... Aparte de eso (en esta casa la Lotería está proscrita), pues se pagan un par o tres de seguros, tan baratos, asequibles y "opcionales", oiga, últimamente; aprovechamos para recuperarnos de deudas que se han ido arrastrando desde septiembre, tras pagar libros de la E.S.O. (¡pronto vendrán cosas más gordas!), ropa (tal vez), una Matrícula de Conservatorio (estudios, los musicales, YA SÓLO al alcance de MUY POCOS) y toda una larga serie interminable de MIERDA -la cual procuro borrar de mi mente el resto del año- con la que se nos ha ido cargando a las familias, sin piedad, sin medida... Por lo general, en invierno la facturas del gas y de la luz se "animan", así que ése es otro pico... ¡Y que no se me olvide la última cuota del IBI y del Impuesto de Circulación, que el Excmo. Ayto., siempre tan atento, ha tenido a bien aplazarme en tres cómodas "entregas"!...
¿Qué le parece?: en efecto, ya ve que me voy a quedar sin el abrigo de alpaca, sin los perfumes italianos o franceses, sin mis "juergas" navideñas, sin kilos y kilos de angulas o cigalas; voy a verme obligado a prescindir de esas botellas de "Vega Sicilia" que me metía, entre pecho y espalda, cada 31 de diciembre, ¡Dios mío!... ¡A este paso tendré que vender o el "Lexus" o el "Cayenne" o el "Maserati", dese cuenta de lo que me está haciendo su política de austeridad, Señor Rajoy!... ¡Y eso que yo no soy de los que le da a otro tipo de vicios, más caros y de dudosa legalidad, usted ya me entiende!...
Esto es lo que nos ha traído vivir tan "por encima de nuestras posibilidades", ¡sí señor!...
En compendio: ENHORABUENA Y GRACIAS.
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito", todavía)
Santander, 14 de julio de 2012
P.D.: En la próxima entrega le voy a dar un par de ideas (gratis) acerca de qué se puede hacer con parte del Patrimonio Español para sacarle algún partido, que nunca estará de más. Sobre todo habida cuenta de que, dentro de poco, vendidos el oro, los aeropuertos, los puertos, las carreteras, los ferrocarriles, los hospitales, las escuelas e institutos, Correos, TVE y Retevisión, los astilleros y resto de fábricas de mayor valor estratégico, la minería, la siderurgia, los satélites, el "Príncipe de Asturias" (el porta-aeronaves, se entiende), los Paradores Nacionales... entonces creo que ya sólo nos quedarán el Museo del Prado, El "Guernica", El Escorial, la Alhambra, El Palacio Real y los "Stradivarius". ¡Suerte con las "liquidaciones" y ánimo!.
miércoles, 11 de julio de 2012
Preámbulo a un SENTIDO AGRADECIMIENTO (5ª carta abierta a Don Mariano Rajoy)
Ilustrísimo Señor Presidente:
Tengo acumuladas una miríada de asuntos que tratar con usted, por mucho que a usted, mayormente, mis cosas no le interesen demasiado. La verdad es que "mis cosas" son las de la mayoría que -hasta el día en que se firmó (pocas jornadas atrás, ¿no es verdad, Señor Presidente?) el "acta de defunción" de la Clase Media Española- ha constituido la base de este país; como lo es la de cualquiera que se precie de ser próspero, ambicioso, ordenado y civilizado. Aun así, no creo que le apetezca ponerse a leer lo que yo tengo que contarle... Me parece haberle dicho ya antes algo muy parecido: disculpe si me repito.
Ahora, verá: tengo que seguir con mi vida; hasta el punto en que me dejen ustedes, políticos, especuladores y oligarcas en general. Alguna responsabilidad han tenido en mi destino (todo hay que decirlo) algunos de mis colegas de profesión, pero eso es algo que va aparte, como quien dice, y yo ya les tengo dichas unas cuantas cosas a ellos, no se crea que un servidor es de los que se callan, no...
Lo fundamental va a ser mi más sentida EXPRESIÓN DE AGRADECIMIENTO: a usted y a los miembros de su equipo. Por estar haciendo algo tan difícil -¡y de tanta responsabilidad!-, con gran dolor de sus muy pías almas, aunque por nuestro propio bien, ¿no es así?: el de todas las españolas y españoles, sí señor... Incluidos algunos que podrían estar de paso, pero, la verdad es que con ellos casi que no va esto, pues tendrán a donde irse, llegado el caso; pero nosotros sólo tenemos esto: lo que ustedes nos dejen, entiéndase.
Lo dicho, Don Mariano: permanezca atento a mi "punto de vista", que es el de millones (modestamente). Y es que, mire usted -perdóneme que le interpele así-, pero de estas cosas de luchar duro por lo básico -por la comida, la vivienda, una decente formación para los hijos, el trabajo y la dignidad- usted no sabe nada o a duras penas (y, si acaso, por "referencias").
De momento, termino con un deseo: que, por el bien de la gente trabajadora y decente de este país, usted tenga alguna claridad, alguna certeza preclara, sobre las consecuencias (en el largo plazo) de todo lo que nos están haciendo.
Un saludo,
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito", todavía)
Santander, 11 de julio de 2012
Tengo acumuladas una miríada de asuntos que tratar con usted, por mucho que a usted, mayormente, mis cosas no le interesen demasiado. La verdad es que "mis cosas" son las de la mayoría que -hasta el día en que se firmó (pocas jornadas atrás, ¿no es verdad, Señor Presidente?) el "acta de defunción" de la Clase Media Española- ha constituido la base de este país; como lo es la de cualquiera que se precie de ser próspero, ambicioso, ordenado y civilizado. Aun así, no creo que le apetezca ponerse a leer lo que yo tengo que contarle... Me parece haberle dicho ya antes algo muy parecido: disculpe si me repito.
Ahora, verá: tengo que seguir con mi vida; hasta el punto en que me dejen ustedes, políticos, especuladores y oligarcas en general. Alguna responsabilidad han tenido en mi destino (todo hay que decirlo) algunos de mis colegas de profesión, pero eso es algo que va aparte, como quien dice, y yo ya les tengo dichas unas cuantas cosas a ellos, no se crea que un servidor es de los que se callan, no...
Lo fundamental va a ser mi más sentida EXPRESIÓN DE AGRADECIMIENTO: a usted y a los miembros de su equipo. Por estar haciendo algo tan difícil -¡y de tanta responsabilidad!-, con gran dolor de sus muy pías almas, aunque por nuestro propio bien, ¿no es así?: el de todas las españolas y españoles, sí señor... Incluidos algunos que podrían estar de paso, pero, la verdad es que con ellos casi que no va esto, pues tendrán a donde irse, llegado el caso; pero nosotros sólo tenemos esto: lo que ustedes nos dejen, entiéndase.
Lo dicho, Don Mariano: permanezca atento a mi "punto de vista", que es el de millones (modestamente). Y es que, mire usted -perdóneme que le interpele así-, pero de estas cosas de luchar duro por lo básico -por la comida, la vivienda, una decente formación para los hijos, el trabajo y la dignidad- usted no sabe nada o a duras penas (y, si acaso, por "referencias").
De momento, termino con un deseo: que, por el bien de la gente trabajadora y decente de este país, usted tenga alguna claridad, alguna certeza preclara, sobre las consecuencias (en el largo plazo) de todo lo que nos están haciendo.
Un saludo,
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito", todavía)
Santander, 11 de julio de 2012
ÓFISIS PUBLICA
En esta dirección:
http://torresmasaltas2.wordpress.com/
Un saludo a mis fieles seguidores (si los hubiera).
ÓFISIS
http://torresmasaltas2.wordpress.com/
Un saludo a mis fieles seguidores (si los hubiera).
ÓFISIS
sábado, 7 de julio de 2012
ÓFISIS
Os invito a continuar la "aventura"... Gracias, de corazón, a los que tengáis el valor de seguirme. Un abrazo a todos.
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito", todavía)
http://torresmasaltas2.wordpress.com/
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito", todavía)
http://torresmasaltas2.wordpress.com/
CAMBIO DE ENFOQUE (a Don Mariano Rajoy)
NOTA: Se debe tener en cuenta que ésta es la última entrada. Por lo tanto, si se desea conocer la verdadera secuencia de este BLOG, habrá que acudir, primero, a las entradas más antiguas -la primera es del día 1 de septiembre de 2010.
E-mail: balzuel@gmail.com
Excelentísimo Señor Presidente:
En breve (casi de forma inmediata), mostraré en este blog un enlace que le llevará a "TORRES MÁS ALTAS, Segunda parte". Espero no posponer en exceso su espera, pues es urgente (al menos, así yo lo considero) que estas humildes y, mayormente, IGNORADAS palabras mías, tengan tanta repercusión y eco como sea posible.
¿Sabe, Excelencia, lo que es un "log"?: pues en el muy polisémico idioma de Shakespeare, "log" puede ser un madero; pero también es un cuaderno de bitácora. Es decir: se trata de un diario. Un "blog" es su versión digital y virtual (web log). El caso es que yo, a partir de ahora, procuraré apartarme de retóricas y de teorías; de épicas y de líricas, pues ése ha sido un "lujo" que, hasta hoy (en una prórroga que yo sabía no podría durar para siempre), me he podido permitir como "profesor interino con galones".
Lo que le ofrezco a usted -y a todo el que quiera leerme- es una crónica detallada, y sin demasiados adornos, de una decadencia, de un drama, de un desastre anunciado e inexorable: un recuento de días, de hechos, de renuncias, de angustias, de insomnios, de cuerpos y mentes vapuleados, de personas derrotadas, de familias rotas, de relaciones personales al borde de la quiebra o arruinadas, de hambre, de abusos, de dilemas sin solución, de coyunturas sin remedio, de esperas sin esperanza, de miseria, de llanto... ¿Podrá haber más, algo distinto?... ¿Seguirán los mismos "capitanes" al timón de todo esto?: si la respuesta es SÍ (no creo que haya otra), entonces acaso me haya quedado corto en el recuento...
Puede que me acabe sintiendo como Ana Frank (salvando las enormes distancias), atrapado en una especie de desván secreto (pero público), al que nadie o muy pocos se asomarán: por miedo, por pudor, por aprensión, por temor a ver a sus propios fantasmas, por vergüenza y hasta por preservar su salud mental... No faltarán los que sientan desprecio y se crean "mejores"; como "agredidos" por la insolencia del que muestra lo más degradante y decepcionante ante su pequeño y tranquilo "paraíso particular", sembrado de hermosas flores que huelen a éxito personal y profesional: una especie de visión inquietante y ofensiva; un edificio feo, que obstruye la hermosa vista de la calmada bahía de sus vidas.
Por mi parte, creo que le ha debido quedar claro que me propongo iniciar la crónica de un naufragio: mi feo e inoportuno edificio se vendrá abajo; y, convertido en un viejo cascarón, serán entonces, los felices dueños de algún paraíso con vistas, testigos en la distancia, posiblemente, de un remoto, callado, breve e insignificante hundimiento. Uno más (y no creo que agiten ni un solo dedo, ni que permitan que una sola fracción de su alma se conmueva).
Doy por fallecido a Sísifo, por tanto: no tiene sentido un personaje que ha sido aplastado -en una de sus muchas ascensiones- por la enorme piedra que empujaba. Ya no hay lucha (ni siquiera una tan absurda), pues se sabe que no hay esperanza; ni ningún logro posible al cabo de la reiterada pendiente.
Carlos A. Torres Velasco
P.D.: Sólo me queda rogar que algo Superior a nosotros (si es que existe), nos libre de mis visiones.
E-mail: balzuel@gmail.com
Excelentísimo Señor Presidente:
En breve (casi de forma inmediata), mostraré en este blog un enlace que le llevará a "TORRES MÁS ALTAS, Segunda parte". Espero no posponer en exceso su espera, pues es urgente (al menos, así yo lo considero) que estas humildes y, mayormente, IGNORADAS palabras mías, tengan tanta repercusión y eco como sea posible.
¿Sabe, Excelencia, lo que es un "log"?: pues en el muy polisémico idioma de Shakespeare, "log" puede ser un madero; pero también es un cuaderno de bitácora. Es decir: se trata de un diario. Un "blog" es su versión digital y virtual (web log). El caso es que yo, a partir de ahora, procuraré apartarme de retóricas y de teorías; de épicas y de líricas, pues ése ha sido un "lujo" que, hasta hoy (en una prórroga que yo sabía no podría durar para siempre), me he podido permitir como "profesor interino con galones".
Lo que le ofrezco a usted -y a todo el que quiera leerme- es una crónica detallada, y sin demasiados adornos, de una decadencia, de un drama, de un desastre anunciado e inexorable: un recuento de días, de hechos, de renuncias, de angustias, de insomnios, de cuerpos y mentes vapuleados, de personas derrotadas, de familias rotas, de relaciones personales al borde de la quiebra o arruinadas, de hambre, de abusos, de dilemas sin solución, de coyunturas sin remedio, de esperas sin esperanza, de miseria, de llanto... ¿Podrá haber más, algo distinto?... ¿Seguirán los mismos "capitanes" al timón de todo esto?: si la respuesta es SÍ (no creo que haya otra), entonces acaso me haya quedado corto en el recuento...
Puede que me acabe sintiendo como Ana Frank (salvando las enormes distancias), atrapado en una especie de desván secreto (pero público), al que nadie o muy pocos se asomarán: por miedo, por pudor, por aprensión, por temor a ver a sus propios fantasmas, por vergüenza y hasta por preservar su salud mental... No faltarán los que sientan desprecio y se crean "mejores"; como "agredidos" por la insolencia del que muestra lo más degradante y decepcionante ante su pequeño y tranquilo "paraíso particular", sembrado de hermosas flores que huelen a éxito personal y profesional: una especie de visión inquietante y ofensiva; un edificio feo, que obstruye la hermosa vista de la calmada bahía de sus vidas.
Por mi parte, creo que le ha debido quedar claro que me propongo iniciar la crónica de un naufragio: mi feo e inoportuno edificio se vendrá abajo; y, convertido en un viejo cascarón, serán entonces, los felices dueños de algún paraíso con vistas, testigos en la distancia, posiblemente, de un remoto, callado, breve e insignificante hundimiento. Uno más (y no creo que agiten ni un solo dedo, ni que permitan que una sola fracción de su alma se conmueva).
Doy por fallecido a Sísifo, por tanto: no tiene sentido un personaje que ha sido aplastado -en una de sus muchas ascensiones- por la enorme piedra que empujaba. Ya no hay lucha (ni siquiera una tan absurda), pues se sabe que no hay esperanza; ni ningún logro posible al cabo de la reiterada pendiente.
Carlos A. Torres Velasco
P.D.: Sólo me queda rogar que algo Superior a nosotros (si es que existe), nos libre de mis visiones.
Tercera carta abierta al Presidente del Gobierno, Don Mariano Rajoy
Excelentísimo Señor Presidente:
Mañana (de hecho, en apenas unos minutos; cuando redacto estas palabras, se entiende) se cumplen dos años del día exacto que, probablemente, marque el resto de mi vida. Mantengo la esperanza de que no sea así hasta el final (a pesar de todo, soy una persona esperanzada), pero, hasta el momento y a lo largo de estos más de setecientos días, ese día fatídico de jolgorio en Pamplona, terminaría por condicionar -gravemente- mi futuro, mi carrera, mis relaciones personales y profesionales, mi estado mental y espiritual -y quién sabe si también el físico, a la larga-, así como cualquier otro aspecto que defina y conforme a una persona y su vida en su conjunto.
Lo que más detesto de esta situación crónica y desquiciada es la forma en que afecta, además, a todos los que me rodean. Es difícil explicar y detallar hasta qué punto tantos dependen de mí o se ven afectados, de un modo u otro, por lo que a mí me ha pasado y aun me pasa... Pero no me voy a centrar en esa "efeméride", Don Mariano: más bien, le quiero contar algo de lo que he estado haciendo últimamente, pues mi deseo es que usted se ponga en el lugar de los que estamos a años luz de La Moncloa o de La Moraleja.
Creo que, en resumen, lo que he estado haciendo es CUMPLIR CON MI DEBER. En realidad, siempre lo he hecho, Señor Presidente. No quiero decir con ello que éste que se dirige a usted sea intachable, ¡nada más lejos!... Pero si el deber de un ciudadano es esforzarse (en el estudio o en el trabajo), ser honesto y leal a la sociedad y al Estado, pagar sus impuestos, respetar las leyes y las normas cívicas (¡y las de tráfico!: ya debo ser de los pocos que AUN usan los intermitentes), vivir y dejar vivir, mantener vivos la curiosidad y el espíritu crítico, discernir con criterio (por lo tanto), votar cuando se le requiera, etc., etc... Y si a eso se suma haber dado al mundo una hermosa, sensible, estudiosa y responsable hija, entonces este ciudadano ha cumplido más que dignamente. Lamentablemente... lo que se percibe en estos días (se lo digo con una absoluta convicción y muy preocupado) es que nada parece suficiente para los "voraces mercados" o para un Estado ABUSIVO E IMPLACABLE, que se ceba, precisamente, en los más leales, en los más decentes, que somos la mayoría: en los que MENOS se merecen tanta prepotencia, Don Mariano.
Pero yo ya le he dicho antes cosas parecidas... Ahora le explico, sin tanto rodeo, lo que, de verdad, he estado haciendo en las últimas horas. ¿Le interesaría si le digo que he estado VIVIENDO?... No sin un cierto cargo de conciencia, eso sí; pero no por estar "abusando de mis posibilidades" (ya le pondré al tanto), sino porque no puedo apartar de mi cabeza a los "sacrificados" en toda esta masacre perpetrada por su muy benéfico, responsable y sensato Gobierno (a propósito: aun espero de alguno de los miembros de dicho Gobierno alguna explicación acerca del "premio" que les/nos espera a los "penitentes"; y para cuándo está previsto)... Creo que ya le he podido exponer que éste que se dirige a usted aun se mantiene erguido: ¡por poco lo estoy! En fin...
Verá: hoy me he gastado 300€; lo que, imagino, no le puede impresionar (apenas supondrá el monto al que ascienden las dietas de un ministro en un día), pero es una cifra respetable, con la que (si le sirve para hacerse una idea) pueden comer tres personas en esta casa durante un mes, más o menos. Pero no es comida lo que he adquirido, sino parte del mobiliario con el que equipo una vivienda que, hace apenas unos meses compré, lo cual supuso para el Estado (y para alguno de sus contados colegas) unos cuantos miles de euros en impuestos y demás regalías. Le recuerdo que esta compra -u otras muchas- incluye un IVA del 18%, e implica, asimismo, que el autónomo que instaló los muebles paga otros nada desdeñables tributos (además del inevitable y consiguiente gasto en combustible, por lo que el Estado también se lleva un pico).
Podría continuar con un repaso exhaustivo a los "eslabones" de esta cadena, pero a un Registrador como usted poco hay que explicarle, Don Mariano: ¡hasta yo lo entiendo, y sólo soy un pobre Lcdo. en Bellas Artes!, amén de un opositor "fracasado" (léase RECHAZADO)... El caso es que para mantener en marcha esta "máquina" (este proceso por el cual la gente genera "sinergias", actividad, DINERO) hace falta, como mínimo, tener un trabajo y hasta una ínfima esperanza de poder mantenerlo (el mismo u otro parecido: como cuando un ministro cesa y pasa a ser Consejero de un banco o de una compañía eléctrica; éste es un ejemplo que, sin duda, entenderá).
¿Entiende por qué le he estado diciendo que hoy "he cumplido con mi deber"?. Y hace unos días, otros 300€ (¡tirando la casa por la ventana, oiga!), que me he gastado en una bicicleta para mi hija, ¿qué le parece?: ¡¿UN DESPILFARRO?! ¿UNA LOCURA INSENSATA?... Eso será, en realidad, cuando ustedes nos quiten la "extra"; ¿y a los "apestados interinos" los meses del verano?... Lo cierto es que... ¡¡¿PARA QUÉ DIABLOS VAMOS A "PRIVARNOS", SI APENAS NOS SERVIRÍAN LOS AHORROS PARA IR TIRANDO UN PAR DE MESES MÁS?!!... ¿Y LUEGO, DON MARIANO?... ¿NOS VA A "RESCATAR" USTED?...
Con lo que se puede encontrar el país -en MUY poco tiempo- es con cientos de miles o con millones de INSOLVENTES y morosos, a los que les importe UN BLEDO lo que ustedes les puedan hacer, pues poco o nada tendrían que perder (suponiendo que ya hayan sido privados de sus trabajos, de sus viviendas, de sus pertenencias personales, de sus recuerdos familiares y, en definitiva, de su DIGNIDAD)... Y a propósito: ¿¡POR ENCIMA DE NUESTRAS POSIBILIDADES!?... ¿Usted se cree que esta locura de especulación y CODICIA, Señor Presidente, la hemos desencadenado los españoles más modestos; que los precios desorbitados y terriblemente INJUSTOS -¡de un bien básico, como es la vivienda!- los hemos decidido los ciudadanos, los muy ahogados y acosados compradores?...
Supongo que se hace cargo de la situación; y si no, pues yo se la explico: apenas necesitaría tres tardes... Y no creo que hagan falta ni tres meses para poner a MUUUUCHA gente al borde de un precipicio: puede que, antes de arrojarse al vacío, se den la vuelta y opten por enfrentarse a la fuerza que los empuja... ¿Han considerado usted y sus "estrategas" este escenario?... ¿Se lo han explicados ustedes a nuestros acreedores?... Claro que a ellos puede que les interese la posibilidad de arruinar -primero- a un país completo, para poder así -más tarde- sacar tajada en una eventual e inmensa reconstrucción, ¿no le parece?... Encima, encontrarían a su disposición (y a su merced) una masa ingente de "mano de obra" barata, sumisa y desesperada... Pero esto es sólo una "teoría". ¿O no?...
Para terminar, le transcribo unas palabras que escribí hace unos días, Señor Presidente:
"Tal vez sea de los pocos que ahora tienen el derecho (y hasta el DEBER) de estar esperanzados. Pero eso no me puede hacer olvidar que la amenaza persiste; y, sobre todo, que hay miles que son o han sido mis compañeros, y ahora se ven en la cuneta: con "lo puesto", sin amparo, sin derechos (o con muy pocos: indecentemente mermados, a traición), sin esperanza...
Me estremezco ante la mera idea de mi pasividad ante este espanto: procuraré no consentírmelo nunca. Y espero no dejar de discernir con claridad quiénes son mis verdaderos enemigos, sea cual sea su naturaleza o procedencia: lamento, por cierto, contar ya con demasiados (y demasiado poderosos o arbitrarios)".
Mañana (de hecho, en apenas unos minutos; cuando redacto estas palabras, se entiende) se cumplen dos años del día exacto que, probablemente, marque el resto de mi vida. Mantengo la esperanza de que no sea así hasta el final (a pesar de todo, soy una persona esperanzada), pero, hasta el momento y a lo largo de estos más de setecientos días, ese día fatídico de jolgorio en Pamplona, terminaría por condicionar -gravemente- mi futuro, mi carrera, mis relaciones personales y profesionales, mi estado mental y espiritual -y quién sabe si también el físico, a la larga-, así como cualquier otro aspecto que defina y conforme a una persona y su vida en su conjunto.
Lo que más detesto de esta situación crónica y desquiciada es la forma en que afecta, además, a todos los que me rodean. Es difícil explicar y detallar hasta qué punto tantos dependen de mí o se ven afectados, de un modo u otro, por lo que a mí me ha pasado y aun me pasa... Pero no me voy a centrar en esa "efeméride", Don Mariano: más bien, le quiero contar algo de lo que he estado haciendo últimamente, pues mi deseo es que usted se ponga en el lugar de los que estamos a años luz de La Moncloa o de La Moraleja.
Creo que, en resumen, lo que he estado haciendo es CUMPLIR CON MI DEBER. En realidad, siempre lo he hecho, Señor Presidente. No quiero decir con ello que éste que se dirige a usted sea intachable, ¡nada más lejos!... Pero si el deber de un ciudadano es esforzarse (en el estudio o en el trabajo), ser honesto y leal a la sociedad y al Estado, pagar sus impuestos, respetar las leyes y las normas cívicas (¡y las de tráfico!: ya debo ser de los pocos que AUN usan los intermitentes), vivir y dejar vivir, mantener vivos la curiosidad y el espíritu crítico, discernir con criterio (por lo tanto), votar cuando se le requiera, etc., etc... Y si a eso se suma haber dado al mundo una hermosa, sensible, estudiosa y responsable hija, entonces este ciudadano ha cumplido más que dignamente. Lamentablemente... lo que se percibe en estos días (se lo digo con una absoluta convicción y muy preocupado) es que nada parece suficiente para los "voraces mercados" o para un Estado ABUSIVO E IMPLACABLE, que se ceba, precisamente, en los más leales, en los más decentes, que somos la mayoría: en los que MENOS se merecen tanta prepotencia, Don Mariano.
Pero yo ya le he dicho antes cosas parecidas... Ahora le explico, sin tanto rodeo, lo que, de verdad, he estado haciendo en las últimas horas. ¿Le interesaría si le digo que he estado VIVIENDO?... No sin un cierto cargo de conciencia, eso sí; pero no por estar "abusando de mis posibilidades" (ya le pondré al tanto), sino porque no puedo apartar de mi cabeza a los "sacrificados" en toda esta masacre perpetrada por su muy benéfico, responsable y sensato Gobierno (a propósito: aun espero de alguno de los miembros de dicho Gobierno alguna explicación acerca del "premio" que les/nos espera a los "penitentes"; y para cuándo está previsto)... Creo que ya le he podido exponer que éste que se dirige a usted aun se mantiene erguido: ¡por poco lo estoy! En fin...
Verá: hoy me he gastado 300€; lo que, imagino, no le puede impresionar (apenas supondrá el monto al que ascienden las dietas de un ministro en un día), pero es una cifra respetable, con la que (si le sirve para hacerse una idea) pueden comer tres personas en esta casa durante un mes, más o menos. Pero no es comida lo que he adquirido, sino parte del mobiliario con el que equipo una vivienda que, hace apenas unos meses compré, lo cual supuso para el Estado (y para alguno de sus contados colegas) unos cuantos miles de euros en impuestos y demás regalías. Le recuerdo que esta compra -u otras muchas- incluye un IVA del 18%, e implica, asimismo, que el autónomo que instaló los muebles paga otros nada desdeñables tributos (además del inevitable y consiguiente gasto en combustible, por lo que el Estado también se lleva un pico).
Podría continuar con un repaso exhaustivo a los "eslabones" de esta cadena, pero a un Registrador como usted poco hay que explicarle, Don Mariano: ¡hasta yo lo entiendo, y sólo soy un pobre Lcdo. en Bellas Artes!, amén de un opositor "fracasado" (léase RECHAZADO)... El caso es que para mantener en marcha esta "máquina" (este proceso por el cual la gente genera "sinergias", actividad, DINERO) hace falta, como mínimo, tener un trabajo y hasta una ínfima esperanza de poder mantenerlo (el mismo u otro parecido: como cuando un ministro cesa y pasa a ser Consejero de un banco o de una compañía eléctrica; éste es un ejemplo que, sin duda, entenderá).
¿Entiende por qué le he estado diciendo que hoy "he cumplido con mi deber"?. Y hace unos días, otros 300€ (¡tirando la casa por la ventana, oiga!), que me he gastado en una bicicleta para mi hija, ¿qué le parece?: ¡¿UN DESPILFARRO?! ¿UNA LOCURA INSENSATA?... Eso será, en realidad, cuando ustedes nos quiten la "extra"; ¿y a los "apestados interinos" los meses del verano?... Lo cierto es que... ¡¡¿PARA QUÉ DIABLOS VAMOS A "PRIVARNOS", SI APENAS NOS SERVIRÍAN LOS AHORROS PARA IR TIRANDO UN PAR DE MESES MÁS?!!... ¿Y LUEGO, DON MARIANO?... ¿NOS VA A "RESCATAR" USTED?...
Con lo que se puede encontrar el país -en MUY poco tiempo- es con cientos de miles o con millones de INSOLVENTES y morosos, a los que les importe UN BLEDO lo que ustedes les puedan hacer, pues poco o nada tendrían que perder (suponiendo que ya hayan sido privados de sus trabajos, de sus viviendas, de sus pertenencias personales, de sus recuerdos familiares y, en definitiva, de su DIGNIDAD)... Y a propósito: ¿¡POR ENCIMA DE NUESTRAS POSIBILIDADES!?... ¿Usted se cree que esta locura de especulación y CODICIA, Señor Presidente, la hemos desencadenado los españoles más modestos; que los precios desorbitados y terriblemente INJUSTOS -¡de un bien básico, como es la vivienda!- los hemos decidido los ciudadanos, los muy ahogados y acosados compradores?...
Supongo que se hace cargo de la situación; y si no, pues yo se la explico: apenas necesitaría tres tardes... Y no creo que hagan falta ni tres meses para poner a MUUUUCHA gente al borde de un precipicio: puede que, antes de arrojarse al vacío, se den la vuelta y opten por enfrentarse a la fuerza que los empuja... ¿Han considerado usted y sus "estrategas" este escenario?... ¿Se lo han explicados ustedes a nuestros acreedores?... Claro que a ellos puede que les interese la posibilidad de arruinar -primero- a un país completo, para poder así -más tarde- sacar tajada en una eventual e inmensa reconstrucción, ¿no le parece?... Encima, encontrarían a su disposición (y a su merced) una masa ingente de "mano de obra" barata, sumisa y desesperada... Pero esto es sólo una "teoría". ¿O no?...
Para terminar, le transcribo unas palabras que escribí hace unos días, Señor Presidente:
"Tal vez sea de los pocos que ahora tienen el derecho (y hasta el DEBER) de estar esperanzados. Pero eso no me puede hacer olvidar que la amenaza persiste; y, sobre todo, que hay miles que son o han sido mis compañeros, y ahora se ven en la cuneta: con "lo puesto", sin amparo, sin derechos (o con muy pocos: indecentemente mermados, a traición), sin esperanza...
Me estremezco ante la mera idea de mi pasividad ante este espanto: procuraré no consentírmelo nunca. Y espero no dejar de discernir con claridad quiénes son mis verdaderos enemigos, sea cual sea su naturaleza o procedencia: lamento, por cierto, contar ya con demasiados (y demasiado poderosos o arbitrarios)".
jueves, 5 de julio de 2012
Recordatorio
Más vigente que nunca: sobre todo la segunda parte del texto... ¡Y ya tiene un año! ¡Cómo pasa el tiempo!...
http://sisifoavejentado.blogspot.com.es/2011/06/acceso-o-absceso.html
Sísifo
http://sisifoavejentado.blogspot.com.es/2011/06/acceso-o-absceso.html
Sísifo
miércoles, 4 de julio de 2012
Segunda Carta Abierta a Don Mariano Rajoy (2ª parte)
NOTA: Se debe tener en cuenta que ésta es la última entrada. Por lo tanto, si se desea conocer la verdadera secuencia de este BLOG, habrá que acudir, primero, a las entradas más antiguas -la primera es del día 1 de septiembre de 2010.
E-mail: balzuel@gmail.com
Excelentísimo Señor:
Disculpe por la demora, pero algunos asuntos de esta vida plebeya, que uno procura llevar con la mayor dignidad posible, me han estado ocupando en estos primeros días frenéticos de "asueto" (recordará usted que quien le escribe es aun un profesor de Secundaria).
No sé si lograré una continuidad con ésa que, antes de estas líneas, denominé "primera parte": me va a resultar difícil enlazar con la corriente de esos pensamientos concretos, aunque lo que nos acucia estos días es casi lo mismo; una sola y triste cosa... Recordará, por cierto, que le he puesto al tanto de mis limitaciones, flagrantes y palmarias, de gris y mediocre ciudadano: por tanto, no debe extrañarnos tanta duda, tanta indecisión; ni la obvia ausencia de claridad en las ideas...
Me quiero centrar, no obstante... Verá: antes de nada, le quiero contar que, por este curso, parece que me "salvo". Es una buena noticia: asumo que usted -a quien no debo considerar un desalmado- se alegra, y supongo que me ha tenido presente en sus oraciones. Se lo agradezco... Pero no quisiera obviar el delicado matiz que la construcción adverbial "por este curso" (muy parecida a "de momento") implica. Creo que ahí es donde radica el meollo del asunto.
Como buen y sensato funcionario de carrera que es, usted me animará a perseverar y a estudiar más; y me transmitirá, asimismo, su ánimo y la genuina confianza en que un servidor, con esfuerzo y coherencia, culmine la lucha con éxito... ¡algún día!... El problema, Señor Presidente (y éste es uno de los asuntos claves que me anima a interpelarlo), es que esa lucha se nos hace, a miles y hasta a decenas de miles, cada vez más inasequible (en un estilo y sentido casi "kafkianos" de lo inasequible, entiéndame); y que he venido observando (ya soy un verdadero "experto", a mi pesar: siete oposiciones, recuerde) demasiadas incoherencias, deficiencias, arbitrariedades, defectos intrínsecos y "endémicos" en los procesos de selección, así como en los criterios que en ellos se aplican... Los cuales, al parecer, ninguno de ustedes -¡NADIE!- está dispuesto a revisar, a reconsiderar.
El caso es que, con tantos elementos "aleatorios" en juego (nunca mejor dicho), a mí ya me resulta imposible afrontar, con esperanza y fuerza suficientes, algo que debería ser mucho más que una inmensa "timba" en la que nunca parecen tocarme unas buenas cartas (perdone por la vulgaridad, pero ésa es la impresión que a menudo obtengo).
No sería de buenos nacidos desagradecer los ánimos y hasta la retórica con que se adornan la "confianza" o la "esperanza": tal vez sólo sea retórica, pero es mejor que ser aplastado, claro. Lo malo, Señor Presidente, es que ya se está poniendo en práctica el "aplastamiento"... Es más sutil que el mero despanzurramiento, y no parece tan sangriento; pero ya he tenido la oportunidad de ver los efectos en algunos de los caídos... En concreto, padres de familia como usted (de su edad, más o menos), temblando de angustia, lívidos y con su mirada perdida: enfrentados a la "esperanzada" perspectiva de cobrar, por una media plaza de vacante, hasta el 65% de lo que han estado ganando a lo largo de una década o más... ¡Unos perfectos egoístas, insolidarios, irresponsables!, ¿no es cierto, Señor Presidente?... Deberían estar agradecidos, ¿a que sí?... ¡Pues ni le cuento el aspecto de los que lo pierden todo!... Y a propósito: ¿se le ha ocurrido a alguno de ustedes sugerir a los Señores Banqueros -con una "sugerencia" por Decreto Ley- que empiecen a cobrar a esas familias un 35% menos en sus hipotecas?... ¡Eso no!, ¿verdad?...
Como ya creo haberle anunciado, puede que esta vez me salve el idioma de los pérfidos británicos... Lo aprendí ya mayorcito, "por libre" y a lo bestia. ¡Uno de los pocos aciertos en mi vida!: quedarme en Irlanda tras uno de mis muchos "naufragios"... Le transcribo ahora unas frases que le escribí a una colega (de carrera) que me aprecia:
Me gustaría, en efecto, estar escribiéndole a usted y al mundo otras cosas, muy diferentes... Haga algo al respecto, para que ciertas "REFORMAS" de nuestras reglas de juego lo empiecen a hacer posible. De corazón y con humildad se lo pido.
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito" de Dibujo)
E-mail: balzuel@gmail.com
Excelentísimo Señor:
Disculpe por la demora, pero algunos asuntos de esta vida plebeya, que uno procura llevar con la mayor dignidad posible, me han estado ocupando en estos primeros días frenéticos de "asueto" (recordará usted que quien le escribe es aun un profesor de Secundaria).
No sé si lograré una continuidad con ésa que, antes de estas líneas, denominé "primera parte": me va a resultar difícil enlazar con la corriente de esos pensamientos concretos, aunque lo que nos acucia estos días es casi lo mismo; una sola y triste cosa... Recordará, por cierto, que le he puesto al tanto de mis limitaciones, flagrantes y palmarias, de gris y mediocre ciudadano: por tanto, no debe extrañarnos tanta duda, tanta indecisión; ni la obvia ausencia de claridad en las ideas...
Me quiero centrar, no obstante... Verá: antes de nada, le quiero contar que, por este curso, parece que me "salvo". Es una buena noticia: asumo que usted -a quien no debo considerar un desalmado- se alegra, y supongo que me ha tenido presente en sus oraciones. Se lo agradezco... Pero no quisiera obviar el delicado matiz que la construcción adverbial "por este curso" (muy parecida a "de momento") implica. Creo que ahí es donde radica el meollo del asunto.
Como buen y sensato funcionario de carrera que es, usted me animará a perseverar y a estudiar más; y me transmitirá, asimismo, su ánimo y la genuina confianza en que un servidor, con esfuerzo y coherencia, culmine la lucha con éxito... ¡algún día!... El problema, Señor Presidente (y éste es uno de los asuntos claves que me anima a interpelarlo), es que esa lucha se nos hace, a miles y hasta a decenas de miles, cada vez más inasequible (en un estilo y sentido casi "kafkianos" de lo inasequible, entiéndame); y que he venido observando (ya soy un verdadero "experto", a mi pesar: siete oposiciones, recuerde) demasiadas incoherencias, deficiencias, arbitrariedades, defectos intrínsecos y "endémicos" en los procesos de selección, así como en los criterios que en ellos se aplican... Los cuales, al parecer, ninguno de ustedes -¡NADIE!- está dispuesto a revisar, a reconsiderar.
El caso es que, con tantos elementos "aleatorios" en juego (nunca mejor dicho), a mí ya me resulta imposible afrontar, con esperanza y fuerza suficientes, algo que debería ser mucho más que una inmensa "timba" en la que nunca parecen tocarme unas buenas cartas (perdone por la vulgaridad, pero ésa es la impresión que a menudo obtengo).
No sería de buenos nacidos desagradecer los ánimos y hasta la retórica con que se adornan la "confianza" o la "esperanza": tal vez sólo sea retórica, pero es mejor que ser aplastado, claro. Lo malo, Señor Presidente, es que ya se está poniendo en práctica el "aplastamiento"... Es más sutil que el mero despanzurramiento, y no parece tan sangriento; pero ya he tenido la oportunidad de ver los efectos en algunos de los caídos... En concreto, padres de familia como usted (de su edad, más o menos), temblando de angustia, lívidos y con su mirada perdida: enfrentados a la "esperanzada" perspectiva de cobrar, por una media plaza de vacante, hasta el 65% de lo que han estado ganando a lo largo de una década o más... ¡Unos perfectos egoístas, insolidarios, irresponsables!, ¿no es cierto, Señor Presidente?... Deberían estar agradecidos, ¿a que sí?... ¡Pues ni le cuento el aspecto de los que lo pierden todo!... Y a propósito: ¿se le ha ocurrido a alguno de ustedes sugerir a los Señores Banqueros -con una "sugerencia" por Decreto Ley- que empiecen a cobrar a esas familias un 35% menos en sus hipotecas?... ¡Eso no!, ¿verdad?...
Como ya creo haberle anunciado, puede que esta vez me salve el idioma de los pérfidos británicos... Lo aprendí ya mayorcito, "por libre" y a lo bestia. ¡Uno de los pocos aciertos en mi vida!: quedarme en Irlanda tras uno de mis muchos "naufragios"... Le transcribo ahora unas frases que le escribí a una colega (de carrera) que me aprecia:
"¡Cuánto odio a los que nos están haciendo esto y a los que lo han hecho posible!... Y lo que más odio de todo es que tenga que gastar mi vida (que podría ser plena, generosa y creativa) en odiar: en diluirme en el espanto de carecer de toda confianza y descartar ya toda esperanza... Me gustaría poder transmitirte algo distinto, pero no me dejan demasiadas opciones".
Me gustaría, en efecto, estar escribiéndole a usted y al mundo otras cosas, muy diferentes... Haga algo al respecto, para que ciertas "REFORMAS" de nuestras reglas de juego lo empiecen a hacer posible. De corazón y con humildad se lo pido.
Carlos A. Torres Velasco (Profesor Interino "Emérito" de Dibujo)
lunes, 2 de julio de 2012
EE.UU. / Segunda carta a M. y otras epístolas de tono airado e hiriente
NOTA: Se debe tener en cuenta que ésta es la última entrada. Por lo tanto, si se desea conocer la verdadera secuencia de este BLOG, habrá que acudir, primero, a las entradas más antiguas -la primera es del día 1 de septiembre de 2010.
E-mail: balzuel@gmail.com
Compruebo que la mayoría abrumadora del tráfico en mi blog, las últimas horas, procede de Estados Unidos... Dice mucho de lo que les importan a mis paisanos casos como el mío. Sí señor, muy elocuente... ¡En fin!, tampoco me pilla por sorpresa.
Dos años ya; escribiendo... Por entonces, un Campeonato del Mundo de fútbol; hoy otra Copa de Europa... Ha sido para mí esta jornada un día sereno, feliz: con mi hija y con mi madre, a quien, para ser sincero, apenas veo... Hace dos años fue parecido, todos juntos... Pero lo que sí que ya no espero es la celebración COMPLETA, definitiva, de una paz que he perseguido, desde hace ya casi catorce años, en vano: mi sino es la DERROTA; y no importa lo que haya hecho o haga de ahora en adelante, pues estoy "marcado", tachado, "inmolado"...
Escribía hace unos días (al poco de confirmar la precariedad o la ruina que me aguardan) que la piedra que empujo, ya me la habían hecho rodar por encima... Aun es pronto para decir ésta u otras cosas, pero llevo en la recámara -desde febrero, al menos- algunas palabras premonitorias y lúcidas, aunque repletas de IRA. Aun no las publicaré... De momento, me alivio con extractos de alguna cartas y reflexiones, hechas a cuenta del gran despropósito que es mi destino; de la vida vista desde el lado de los que no suelen elevar la voz: desde el callejón oscuro de los "perdedores", que son los que deben pedir perdón y, encima, dar las gracias (por nada o apenas nada). Lo dicho...
Ésta es otra, a una interlocutora distinta (ella sí, como yo, profesora interina):
"Creo que ya se acabó la hora de las "palabras". Nos dicen, eso sí, que todo debe aceptarse con "resignación" y moderado "civismo": con una especie de "gallardía" y buen talante, ¡perdedores dignos y, con ánimo, a la cámara de gas! (La vita e bella!). Pero, dime: ¿con qué cara ha de aceptarse la ruina, la depauperación, el fin de toda esperanza?... ¿Qué clase de "fair play" es ése?... ¡Menudos hipócritas todos los que nos proponen esto!.
Me merezco la tranquilidad y la estabilidad, a mis 47, tanto como el que más: como todas las "currantas" de mi asignatura, si no más... (...) Debe ser que me falta ese "algo", esa cosa inefable que irradian los triunfadores y las triunfadoras, no sé... ¡Pero éste que te escribe impartió a un grupo de Bachillerato, en el segundo año de su carrera docente, LOS DOS CURSOS DE DIBUJO TÉCNICO... SI-MUL-TÁ-NEA-MEN-TE!... ¡Con un par de cojones!... ¡Y esos chavales fueron a la Selectividad y sacaron unas notas más que decentes!... Pero suma a eso, por si fuera poco, ¡UN GRUPO DE "COMPENSATORIA"! ¡TECNOLOGÍA!... Esa plaza la había rechazado, por cierto (y no es de extrañar), la número uno de la lista de Dibujo, ¡qué te voy a contar!... Luego tuve a mi Jefe de Dpto., unos años después, de Presidente de Tribunal, pero ya se sabe... ¡Me callo! (de momento).
Llevo siete oposiciones (seis de mi asignatura natural), casi catorce años de sacrificios y de esperanzas frustradas; muchas renuncias, ansiedades, somatizaciones, desolación, incomprensión, acusaciones veladas, reproches explícitos e implícitos... Cientos de "tal vez, Carlos", o de "puede que tú", o de "a lo mejor no es el enfoque", o de "lo que ellos esperan es que", o de "deberías probar otras ocupaciones y hasta otros continentes"... Dos personas, al menos, dependen CASI ABSOLUTAMENTE DE MÍ. No cuento con nadie: mi familia casi no "existe"... Entiéndelo, R.: con la "resignación" no nos basta... De eso no se come...
Lo que me indigna casi más de todo esto es la arbitrariedad: lo poco que les hubiese costado, a mis estimados colegas (muchos me conocían de sobra, como ya te he dicho), hacer lo que ellos SÍ podían hacer... ¡si hubiesen querido!... Pero no: otros les han "molado" más (¿gracias al hecho de contar éstos con un "guión" previo, perfectamente dictado por algún experto veterano, y jugando, por tanto, con ventaja?). ¡Eso sí!: nada de argumentos, nada de explicaciones... Sin unas palabras dedicadas, tal vez (¡ni siquiera a posteriori!), a guiarme, a asesorarme, a ayudarme... Nadie, jamás, me ha brindado eso... ¡JA-MÁS!
E-mail: balzuel@gmail.com
Compruebo que la mayoría abrumadora del tráfico en mi blog, las últimas horas, procede de Estados Unidos... Dice mucho de lo que les importan a mis paisanos casos como el mío. Sí señor, muy elocuente... ¡En fin!, tampoco me pilla por sorpresa.
Dos años ya; escribiendo... Por entonces, un Campeonato del Mundo de fútbol; hoy otra Copa de Europa... Ha sido para mí esta jornada un día sereno, feliz: con mi hija y con mi madre, a quien, para ser sincero, apenas veo... Hace dos años fue parecido, todos juntos... Pero lo que sí que ya no espero es la celebración COMPLETA, definitiva, de una paz que he perseguido, desde hace ya casi catorce años, en vano: mi sino es la DERROTA; y no importa lo que haya hecho o haga de ahora en adelante, pues estoy "marcado", tachado, "inmolado"...
Escribía hace unos días (al poco de confirmar la precariedad o la ruina que me aguardan) que la piedra que empujo, ya me la habían hecho rodar por encima... Aun es pronto para decir ésta u otras cosas, pero llevo en la recámara -desde febrero, al menos- algunas palabras premonitorias y lúcidas, aunque repletas de IRA. Aun no las publicaré... De momento, me alivio con extractos de alguna cartas y reflexiones, hechas a cuenta del gran despropósito que es mi destino; de la vida vista desde el lado de los que no suelen elevar la voz: desde el callejón oscuro de los "perdedores", que son los que deben pedir perdón y, encima, dar las gracias (por nada o apenas nada). Lo dicho...
"¿Sabes, M.?: durante dos cursos tú fuiste para mí una de ésas personas que se te pasan desapercibidas, como hay tantas y en las que apenas reparas. Yo debo haber trabajado ya con decenas como tú a lo largo de estos diez cursos... Creo que nuestra amistad y aprecio (las cosas reales y genuinas no se pueden fingir, ¿verdad, M.?) me confirman que los que pasáis como "de puntillas" al lado de los demás, con humildad y silenciosos, acaso seáis los mejores.
Agradezco a R. que nos pusiese juntos (y solos) en esa guardia de los viernes. Una simple casualidad, pero esto es lo que decide, al cabo, el destino de las personas. En este caso, no podría sentirme más afortunado.
Por desgracia para mí, es posible que yo no sea de los que pasan "desapercibidos", y puede que desencadene rechazos, recelos, envidias... hasta desprecio, quién sabe. ¿Mis grandes "defectos"?: mi heterodoxia, decir casi siempre lo que pienso y expresar, a menudo, lo que siento... Durante un tiempo en la vida (cuando somos jóvenes) creemos en el valor supremo de la VERDAD, de la FRANQUEZA y de la HONESTIDAD. Pronto nos decepcionan y nos revelan la otra "Gran Verdad", que no es sino que la vida está corrompida por lo contrario: la MENTIRA, el disimulo, el fingimiento y eso tan "civilizado" que llaman "diplomacia" o "convenciones sociales" o -más recientemente- lo "políticamente correcto".
Agradezco a R. que nos pusiese juntos (y solos) en esa guardia de los viernes. Una simple casualidad, pero esto es lo que decide, al cabo, el destino de las personas. En este caso, no podría sentirme más afortunado.
Por desgracia para mí, es posible que yo no sea de los que pasan "desapercibidos", y puede que desencadene rechazos, recelos, envidias... hasta desprecio, quién sabe. ¿Mis grandes "defectos"?: mi heterodoxia, decir casi siempre lo que pienso y expresar, a menudo, lo que siento... Durante un tiempo en la vida (cuando somos jóvenes) creemos en el valor supremo de la VERDAD, de la FRANQUEZA y de la HONESTIDAD. Pronto nos decepcionan y nos revelan la otra "Gran Verdad", que no es sino que la vida está corrompida por lo contrario: la MENTIRA, el disimulo, el fingimiento y eso tan "civilizado" que llaman "diplomacia" o "convenciones sociales" o -más recientemente- lo "políticamente correcto".
Puede que yo siempre me haya resistido a asumir eso, y es por ello que se me está haciendo pagar tan cara la osadía. Es solo una teoría, claro, pero estoy convencido de que la mayoría de mis problemas y carencias vienen de esta "obstinación" mía... No cedo, no me uno al "rebaño", me resisto a aceptar los "santos preceptos", busco la coherencia y mantengo mi espíritu crítico siempre alerta... Estas cosas, M., cotizan a la baja; puede que siempre hayan estado en "números rojos", en realidad.
¿Me mencionas la política?; ¿me dices, incluso, que yo debería formar parte de ella?... ¡y que me votarías!... Puede que hagan falta ya, más que nunca, personas que la enfoquen de otra manera... Lo malo, M., es que es muy posible que nos hayan colocado, a la mayoría, en un punto de "no retorno". Pero gracias por la "propuesta" y ese sincero entusiasmo.
Por lo demás, trato de aferrarme a un hilillo de esperanza que -para serte sincero- yo aun conservo y muchos de mis compañeros para sí quisieran... Además, me reconforta OÍR, ESCUCHAR, SABER... que personas como tú aun siguen ahí, que os importa lo que me pase y que estáis dispuestas a animarme y a ayudarme, hasta donde os resulte posible: sólo con eso, ya me siento mucho mejor... Por desgracia, M., la gran mayoría prefiere callar, mantenerse al margen, adoptar una actitud, en el mejor de los casos, de "compungimiento solidario" (quién sabe si fingido).
¿Me mencionas la política?; ¿me dices, incluso, que yo debería formar parte de ella?... ¡y que me votarías!... Puede que hagan falta ya, más que nunca, personas que la enfoquen de otra manera... Lo malo, M., es que es muy posible que nos hayan colocado, a la mayoría, en un punto de "no retorno". Pero gracias por la "propuesta" y ese sincero entusiasmo.
Por lo demás, trato de aferrarme a un hilillo de esperanza que -para serte sincero- yo aun conservo y muchos de mis compañeros para sí quisieran... Además, me reconforta OÍR, ESCUCHAR, SABER... que personas como tú aun siguen ahí, que os importa lo que me pase y que estáis dispuestas a animarme y a ayudarme, hasta donde os resulte posible: sólo con eso, ya me siento mucho mejor... Por desgracia, M., la gran mayoría prefiere callar, mantenerse al margen, adoptar una actitud, en el mejor de los casos, de "compungimiento solidario" (quién sabe si fingido).
(...) Creo que gente como tú me inspira, me da fuerzas, me ayuda a seguir adelante y a luchar... ¡La de cosas que pueden surgir de una hora de guardia en las mañanas de los viernes!... En serio, M.: GRACIAS POR TODO. Te mantendré al tanto. Un fuerte y sincero abrazo".
"Creo que ya se acabó la hora de las "palabras". Nos dicen, eso sí, que todo debe aceptarse con "resignación" y moderado "civismo": con una especie de "gallardía" y buen talante, ¡perdedores dignos y, con ánimo, a la cámara de gas! (La vita e bella!). Pero, dime: ¿con qué cara ha de aceptarse la ruina, la depauperación, el fin de toda esperanza?... ¿Qué clase de "fair play" es ése?... ¡Menudos hipócritas todos los que nos proponen esto!.
Me merezco la tranquilidad y la estabilidad, a mis 47, tanto como el que más: como todas las "currantas" de mi asignatura, si no más... (...) Debe ser que me falta ese "algo", esa cosa inefable que irradian los triunfadores y las triunfadoras, no sé... ¡Pero éste que te escribe impartió a un grupo de Bachillerato, en el segundo año de su carrera docente, LOS DOS CURSOS DE DIBUJO TÉCNICO... SI-MUL-TÁ-NEA-MEN-TE!... ¡Con un par de cojones!... ¡Y esos chavales fueron a la Selectividad y sacaron unas notas más que decentes!... Pero suma a eso, por si fuera poco, ¡UN GRUPO DE "COMPENSATORIA"! ¡TECNOLOGÍA!... Esa plaza la había rechazado, por cierto (y no es de extrañar), la número uno de la lista de Dibujo, ¡qué te voy a contar!... Luego tuve a mi Jefe de Dpto., unos años después, de Presidente de Tribunal, pero ya se sabe... ¡Me callo! (de momento).
Llevo siete oposiciones (seis de mi asignatura natural), casi catorce años de sacrificios y de esperanzas frustradas; muchas renuncias, ansiedades, somatizaciones, desolación, incomprensión, acusaciones veladas, reproches explícitos e implícitos... Cientos de "tal vez, Carlos", o de "puede que tú", o de "a lo mejor no es el enfoque", o de "lo que ellos esperan es que", o de "deberías probar otras ocupaciones y hasta otros continentes"... Dos personas, al menos, dependen CASI ABSOLUTAMENTE DE MÍ. No cuento con nadie: mi familia casi no "existe"... Entiéndelo, R.: con la "resignación" no nos basta... De eso no se come...
Lo que me indigna casi más de todo esto es la arbitrariedad: lo poco que les hubiese costado, a mis estimados colegas (muchos me conocían de sobra, como ya te he dicho), hacer lo que ellos SÍ podían hacer... ¡si hubiesen querido!... Pero no: otros les han "molado" más (¿gracias al hecho de contar éstos con un "guión" previo, perfectamente dictado por algún experto veterano, y jugando, por tanto, con ventaja?). ¡Eso sí!: nada de argumentos, nada de explicaciones... Sin unas palabras dedicadas, tal vez (¡ni siquiera a posteriori!), a guiarme, a asesorarme, a ayudarme... Nadie, jamás, me ha brindado eso... ¡JA-MÁS!
¿Se les estaba cediendo, acaso, ese tipo de información privilegiada a otros más "afines", más "simpáticos"?... Si alguien, a estas alturas, aun se cree que lo que se dilucida en unas oposiciones como éstas es la "idoneidad" o la "profesionalidad" o la "capacidad" de los aspirantes, o es demasiado ingenuo, o está ciego, o es demasiado idiota.
Se me ha estado RECHAZANDO, a sabiendas, sistemáticamente, todos estos años, R. No soy uno de sus "favoritos", uno de ésos que sí molan, que sí son "guays", que son "currantos" o, más bien, "currantas" (lo siento: me llegó al alma esa descripción de un veterano... ¿Y yo? ¡¿Qué mierda soy, so cabronazo, con siete putas oposiciones en la chepa y diez años de profesión, de acá para allá?!).
ARBITRARIEDAD: ése es el único concepto que tiene aquí algún sentido... Ése y el de las "simpatías personales"; por no hablar, directamente, de NE-PO-TIS-MO... ¿Suena demasiado fuerte?: pues deberíais probar con el ruido sordo, constante y turbio de la ansiedad, la angustia y la RUINA".
Se me ha estado RECHAZANDO, a sabiendas, sistemáticamente, todos estos años, R. No soy uno de sus "favoritos", uno de ésos que sí molan, que sí son "guays", que son "currantos" o, más bien, "currantas" (lo siento: me llegó al alma esa descripción de un veterano... ¿Y yo? ¡¿Qué mierda soy, so cabronazo, con siete putas oposiciones en la chepa y diez años de profesión, de acá para allá?!).
ARBITRARIEDAD: ése es el único concepto que tiene aquí algún sentido... Ése y el de las "simpatías personales"; por no hablar, directamente, de NE-PO-TIS-MO... ¿Suena demasiado fuerte?: pues deberíais probar con el ruido sordo, constante y turbio de la ansiedad, la angustia y la RUINA".
domingo, 1 de julio de 2012
Te lo dedico a ti. GRACIAS.
"Hola, M... Estaba pensando en escribiros algo a todos vosotros. La verdad es que me está costando no venirme abajo en algo tan sencillo como es el ejercicio de teclear en mi ordenador. Pero no me parecería bien no dedicarte a ti, muy especialmente, unas palabras... Desde luego, he sentido como, todos estos días atrás, tú eras una de los pocos que lamentaban de corazón mi marcha: con eso hubiese bastado para estar dedicándote estas líneas; y lo hubiese hecho, de todos modos... Por desgracia ya sé, tan temprano, que hay algo más: anoche pude ver las listas de "previsiones" de vacantes para Dibujo; hoy me las han confirmado, y es aun peor, claro... Se lo decía hace una hora a G. B.: prácticamente se me expulsa de la profesión, y se acaba con la continuidad de mi carrera. Algo así, a mi edad y en mis circunstancias, es casi DEFINITIVO.
La situación en que me ponen a mí y a los que, en mayor o menor medida, dependen de mí, es desoladora. Esto es sólo una palabra, claro: no creo que pueda expresar lo que siento, lo que me está despedazando por dentro y lo que me ha impedido dormir casi en toda la noche... Imagino que las que vienen serán iguales o peores, M.
Te contaré, en confianza, que, antes de tomar la decisión de comprar mi "pisito de soltero" (ayer, sin ir más lejos, colocaba, con paz e ilusión, mi equipo de música y colgaba unas estanterías), visité y consulté a Dña. M. L. S. I. -y lo mismo hice con G. B.- acerca de este proyecto personal mío: y les pregunté si me animaban o si creían, por el contrario, que debía echarme atrás... Ambos coincidieron en que debía tener fe y confianza. Ya sabes que nunca me han sobrado ni la una ni la otra, y mi "sexto sentido" siempre me ha indicado la zona más oscura del porvenir... De algún modo, lo quise "ignorar", correr el riesgo: REBELARME ante esta vida, que se me resiste y me lo pone siempre difícil... Le escribía a R. A. hace un rato:
"La mayor parte de mi vida no ha sido muy fácil. Por supuesto, siempre habrá casos peores y hasta terribles. Así que me limito a decir que NO HA SIDO FÁCIL: me refiero a que me ha resultado casi imposible (o absolutamente imposible) enlazar esas cosas que, para la mayoría de los de mi entorno, han fluido con naturalidad, poco a poco, más tarde o más temprano..."
La situación en que me ponen a mí y a los que, en mayor o menor medida, dependen de mí, es desoladora. Esto es sólo una palabra, claro: no creo que pueda expresar lo que siento, lo que me está despedazando por dentro y lo que me ha impedido dormir casi en toda la noche... Imagino que las que vienen serán iguales o peores, M.
Te contaré, en confianza, que, antes de tomar la decisión de comprar mi "pisito de soltero" (ayer, sin ir más lejos, colocaba, con paz e ilusión, mi equipo de música y colgaba unas estanterías), visité y consulté a Dña. M. L. S. I. -y lo mismo hice con G. B.- acerca de este proyecto personal mío: y les pregunté si me animaban o si creían, por el contrario, que debía echarme atrás... Ambos coincidieron en que debía tener fe y confianza. Ya sabes que nunca me han sobrado ni la una ni la otra, y mi "sexto sentido" siempre me ha indicado la zona más oscura del porvenir... De algún modo, lo quise "ignorar", correr el riesgo: REBELARME ante esta vida, que se me resiste y me lo pone siempre difícil... Le escribía a R. A. hace un rato:
"La mayor parte de mi vida no ha sido muy fácil. Por supuesto, siempre habrá casos peores y hasta terribles. Así que me limito a decir que NO HA SIDO FÁCIL: me refiero a que me ha resultado casi imposible (o absolutamente imposible) enlazar esas cosas que, para la mayoría de los de mi entorno, han fluido con naturalidad, poco a poco, más tarde o más temprano..."
Parece, pues, que esa vieja cabrona y burlona (mi vida) pretende, ahora, pararme en seco: ponerme frente a un muro... o al borde de un abismo. ¿Me lo mereceré? ¿Estaré pagando por mis numerosos pecados?... No sé qué haré, M., no sé qué puedo hacer... Lo he dado todo: a estas alturas, a lo largo de todos estos años... Ya se lo he dicho a mi hija, quien, muy sensatamente, me ha preguntado que por qué me metí en lo del piso... Ella es una persona excepcional, con sensibilidad, dignidad y amor propio: todo esto termina (y es lo más terrible de todo) también con su futuro, con su esperanza. ¡Este es el tipo de secuela y de "daño colateral" que me llena de ira y de odio, M.!... ¡Cuánto odio a los que nos están haciendo esto y a los que lo han hecho posible!... Y lo que más odio de todo es que tenga que gastar mi vida (que podría ser plena, generosa y creativa) en odiar: en diluirme en el espanto de carecer de toda confianza y descartar ya toda esperanza... Me gustaría poder transmitirte algo distinto, pero no me dejan demasiadas opciones. Perdona, M., por todo esto..."
Un abrazo muy fuerte...
Santander, 29 de junio de 2012
Carlos Torres Velasco (¿Profesor Interino "Emérito"?)
Un abrazo muy fuerte...
Santander, 29 de junio de 2012
Carlos Torres Velasco (¿Profesor Interino "Emérito"?)
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